Reyal Urbis quintuplica pérdidas y cesa a su consejero delegado

La inmobiliaria Reyal Urbis, que ha presentado este miércoles sus resultados del tercer trimestre del año, ha anunciado la “salida consensuada” de la compañía de su consejero delegado, Pedro Javier Rodera Zazo “debido a la nueva coyuntura del mercado” , según nota de prensa enviada por la promotora a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV). El Confidencial adelantó ayer que los errores de Reyal Urbis ponen a su consejero delegado a los pies de los caballos. Fuentes del sector inmobiliario consultadas por este online, coinciden considerar a Rodera “un chivo expiatorio” y en en conceder al presidente, Rafael Santamaría, “la responsabilidad de los problemas de la compañía.

Rafael Santamaría Trigo continúa como primer ejecutivo de la compañía. El Consejo queda reducido, por tanto, al número de nueve personas. La nota añade que “el Consejo agradece profundamente la labor desarrollada por el Sr. Rodera, que, siguiendo siempre las políticas marcadas por la compañía, ha contribuido decisivamente a mejorar y adpatar al momento actual las estructuras y líneas de negocio de Reyal Urbis”.

Reyal Urbis registró una pérdida neta de 374,64 millones de euros al cierre de los nueve primeros meses del año, lo que supone multiplicar por más de cinco (-455%) la registrada el mismo periodo de 2007. El grupo atribuyó el resultado a la dotación de provisiones de 252 millones de euros por depreciación de activos.

La inmobiliaria duplicó por contra sus ingresos entre enero y septiembre, que sumaron 1.870,88 millones, gracias al incremento de las ventas de activos, fundamentalmente de suelo. El beneficio bruto de explotación (Ebitda) se elevó un 5% y se situó en 102,12 millones de euros.

La facturación de la promoción residencial prácticamente se mantuvo respecto al tercer trimestre del año pasado, con 578 millones de euros obtenidos con la entrega de inmuebles, cifra que prevé aumentar hasta los 900 millones de euros al cierre de 2008.