Contenedores llenos, montañas de bolsas, casi 3.000 toneladas de basura en la calle. Este es el panorama en Málaga desde hace seis días, cuando comenzó la huelga de los trabajadores de la empresa mixta de limpieza Limasa.
Las negociaciones entre el Ayuntamiento de la ciudad andaluza y los sindicatos no han arrojado todavía ninguna solución al conflicto, originado en primer lugar por la recuperación de la paga de productividad que el comité reclama para este año, entre otros puntos relacionados con el bloqueo del convenio colectivo. Las conversaciones continúan a lo largo del domingo.