El neozelandés Kyle Mulinder estaba haciendo piragüismo en aguas de su país con varios amigos cuando vio pasar una sombra junto a su canoa. El grupo no tardó en darse cuenta de que se trataba de una foca, pero en ningún momento se esperaron lo que ocurrió después: el animal emergió del agua con un pulpo en la boca  y, con un giro de cuello, golpeó en la cara a Mulinder con sus tentáculos. "No sé quién se asustó más, el pulpo, la foca o yo", ironizó el piragüista en declaraciones a 'New Zealand Herald'.