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La ONU pide 3.500 cascos azules más para reforzar la misión en Haití
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INSTA A QUE LA AYUDA SE MANTENGA SEIS MESES

La ONU pide 3.500 cascos azules más para reforzar la misión en Haití

El secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, ha pedido al Consejo de Seguridad que amplíe la misión de estabilización en Haití (MINUSTAH) con 3.500 "cascos azules" más,

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La ONU pide 3.500 cascos azules más para reforzar la misión en Haití

El secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, ha pedido al Consejo de Seguridad que amplíe la misión de estabilización en Haití (MINUSTAH) con 3.500 "cascos azules" más, para reforzar la seguridad y mejorar la distribución de asistencia.

Ban, que este lunes informó al Consejo de su visita de seis horas efectuada el domingo al país antillano, pidió también que el incremento de las fuerzas internacionales destacadas en Haití "se prolongue durante seis meses".

El máximo órgano de decisiones de las Naciones Unidas estudia hoy la posibilidad de ampliar el contingente de 8.965 militares y policías que componen la MINUSTAH, para responder a la situación de emergencia que vive el país caribeño desde hace seis días, tras el terremoto que asoló principalmente su capital, Puerto Príncipe. "He pedido al Consejo de Seguridad que aumente las fuerzas policiales en 1.500 unidades, es decir el 67% más de su nivel actual, y a los militares que se amplíen en 2.000 más, que supone un 30% más, en los próximos seis meses", explicó Ban.

El secretario general de la ONU subrayó que el aumento de las fuerzas internacionales era necesario "para desbloquear los cuellos de botella" que está teniendo la distribución de ayuda y "para afrontar el desafío más importante, que es el de la coordinación".

Tres millones de damnificados

Ban explicó que había vuelto a Nueva York "apesadumbrado por la sombría y sobrecogedora situación de Haití. Todo el país ha resultado devastado. Este es el peor desastre humanitario al que se enfrenta la comunidad internacional desde hace varias décadas".

El terremoto que se produjo el pasado 12 de enero en Haití, con epicentro localizado a 15 kilómetros de Puerto Príncipe, ha causado entre 150.000 y 200.000 muertos, así como tres millones de damnificados, según estimaciones del propio Gobierno y organismos internacionales, y la casi completa destrucción de infraestructuras y comunicaciones del que ya era el país más pobre de América.

Tras declararse "muy triste por todo lo que he visto", Ban señaló que "en las caras de la gente se ve paciencia y afán de superar las dificultades" y reiteró su agradecimiento a la comunidad internacional.

Por su parte, el portavoz de la ONU, Martin Nesirky, dijo que la cifra de personas de la organización fallecidas en Puerto Príncipe es de 46 y los desaparecidos superan los 300.

Incidentes aislados

Haití vive una caótica situación desde que ocurrió el desastre, y ya se han producido actos de saqueo y pillaje por el retraso en la distribución de la ayuda de socorro a causa de la falta de seguridad.

Unos 3.000 militares y policías de la MINUSTAH, junto a lo que queda de la Policía Nacional haitiana, se hacen cargo en la actualidad de la seguridad de Puerto Príncipe, uno de los lugares más afectados por el seísmo que tuvo lugar el pasado 12 de enero.

Sobre las acciones de violencia y de pillaje ocurridas, el subsecretario general de la ONU para Asuntos Humanitarios, John Holmes, señaló que "hay incidentes, en los alrededores de la capital, pero son actos aislados".

En la actualidad la Misión, que opera en Haití desde 2004, dispone de 8.965 "cascos azules", entre militares y policías, desplegados en Haití, al mando del general brasileño Floriano Peixoto Vieira Neto. La dirección interina corresponde al diplomático guatemalteco Edmond Mulet, quien fue designado para ese puesto por Ban, ya que su titular, el tunecino Hédi Annabi, y su adjunto, Luiz Carlos da Costa, fallecieron en el terremoto.

A petición del presidente de Haití, René Preval, Estados Unidos ha enviado un contingente militar de más de 10.000 hombres que contribuyen también a la seguridad y a tareas de distribución de asistencia humanitaria.

La reunión se celebra a petición de México, que ocupa un puesto como miembro no permanente del Consejo, y que lo solicitó a China, que actualmente ostenta la presidencia de turno de ese organismo de la ONU.

En MINUSTAH participan con fuerzas militares 18 países y con policías otros 41, entre los que están Argentina, Bolivia, Brasil, Canadá, Chile, China, Colombia, El Salvador, España, EEUU, Ecuador, Francia, Guatemala, Perú y Uruguay, entre otros.

El secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, ha pedido al Consejo de Seguridad que amplíe la misión de estabilización en Haití (MINUSTAH) con 3.500 "cascos azules" más, para reforzar la seguridad y mejorar la distribución de asistencia.

Ban, que este lunes informó al Consejo de su visita de seis horas efectuada el domingo al país antillano, pidió también que el incremento de las fuerzas internacionales destacadas en Haití "se prolongue durante seis meses".

El máximo órgano de decisiones de las Naciones Unidas estudia hoy la posibilidad de ampliar el contingente de 8.965 militares y policías que componen la MINUSTAH, para responder a la situación de emergencia que vive el país caribeño desde hace seis días, tras el terremoto que asoló principalmente su capital, Puerto Príncipe. "He pedido al Consejo de Seguridad que aumente las fuerzas policiales en 1.500 unidades, es decir el 67% más de su nivel actual, y a los militares que se amplíen en 2.000 más, que supone un 30% más, en los próximos seis meses", explicó Ban.

El secretario general de la ONU subrayó que el aumento de las fuerzas internacionales era necesario "para desbloquear los cuellos de botella" que está teniendo la distribución de ayuda y "para afrontar el desafío más importante, que es el de la coordinación".

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