Es noticia
Cómo y quiénes en la City ganaron millones en la noche del Brexit
  1. Mundo
LAS ENCUESTADORAS Y LOS FONDOS DE ALTO RIESGO

Cómo y quiénes en la City ganaron millones en la noche del Brexit

Los fondo de alto riesgo pagaron millones a las empresas de encuestas para tener antes que nadie unos datos que la ley británica prohíbe publicar antes de que la votación haya terminado

Foto: Varias personas cruzan el Millenium Bridge hacia el distrito financiero de Londres, el 8 de mayo de 2018. (Reuters)
Varias personas cruzan el Millenium Bridge hacia el distrito financiero de Londres, el 8 de mayo de 2018. (Reuters)

La actividad en las oficinas de la City fue frenética aquella noche del 23 al 24 de junio de 2016. Nadie durmió. Los sondeos apostaban por la permanencia, pero pasadas las 4.39 de la madrugada, las palabras del veterano periodista de la BBC, David Dimbleby, retumbaron en todo el país: “Estamos fuera”. El triunfo del Brexitempujó la libra hacia un acantilado. Fue la mayor caída de divisa desde el nacimiento del sistema financiero global moderno. Trillones de dólares en valores de activos se evaporaron en cuestión de segundos. Sin embargo, algunos hedge funds ganaron mucho, muchísimo dinero.

Rokos Capital Managment se embolsó más de 100 millones de dólares, o lo que es lo mismo, el 3% de su valor total. Por su parte, Brevan Howard ingresó 160 millones de dólares. Pero tan sólo son algunos ejemplos.

¿Cómo lo hicieron? Sencillamente sabiendo antes que el público los resultados de los sondeos. Una investigación de Bloomerg detalla cómo los fondo de alto riesgo pagaron millones a las empresas de encuestas para tener antes que nadie unos datos que la ley británica prohíbe publicar antes de que la votación haya concluido.

En muchos casos, dio exactamente igual que los sondeos se equivocaran con el resultado. Con conocer 20 minutos antes las encuestas que mueven después los mercados es más que suficiente. Al cerrar las urnas, los primeros datos apostaban por la permanencia. Aquello disparó la libra y cualquiera que lo hubiera conocido con antelación pudo comprar divisa a una precio mucho más barato del que luego la vendió. No importó luego la caída porque el negocio estaba ya hecho.

Aunque en otros casos, las ganancias fueron aún mayores ya que contaban con encuestas que precedían el triunfo de la salida. Aquello sí que fue el paraíso: ir contra corriente comprando a precio de ganga paquetes que el mercado no quería para luego, cuando nadie espera el 'breaking news', llenarte los bolsillos de dólares.

Foto: Un trabajador saca una bandera británica tras una conferencia de prensa en Bruselas. (Reuters)

Nigel Farage, el gran ganador

Pero aún existe una derivada mejor: inflar el valor de la libra cuando ya sabes que triunfará el Brexit porque cuanto mayor sea luego el declive mayores van a ser tus beneficios. Y es aquí cuando aparece el nombre de Nigel Farage, el hombre que hizo una fortuna en la City antes de meterse a dirigir el UKIP. Antes de que se supiera la victoria del divorcio, el político euroescéptico concedió dos entrevistas. En ambas dijo que todo indicaba que la campaña por la permanencia había ganado. En cuanto se cerraron las urnas, Sky News también publicó un sondeo de YouGov donde se daba al Remain un 52% y al Leave un 48%.

El hecho de que una de las compañías de encuestas más respetadas del país y que el protagonista indiscutible de la campaña del Brexit admitiera su derrota -no en una sino en dos ocasiones- hizo que la libra alcanzara su máximo marcador en seis meses. Pero para entonces, Farage ya sabía que finamente iba a ganar el divorcio con la UE.

El 23 de junio, el día de que se celebró el referéndum, el que es ahora uno de los grandes amigos de Donald Trump y su equipo se reunieron en la casa londinense de un asesor del UKIP. El cómo se vivió aquella jornada está detallada en dos libros: 'The Bad Boys of Brexit', escrito por Arron Banks -uno de los principales donantes del UKIP- y 'All Out War: La historia completa de cómo el Brexit hundió a la clase política de Gran Bretaña'; escrito por el periodista Tim Shipman, tras su entrevista con Chris Bruni-Lowe, el que fue principal asesor político de Farage.

Aunque las versiones difieren en algunos datos, ambas coinciden en que el líder del UKIP supo del triunfo del Brexit antes de las 21.40 horas. Farage aseguró a Bloomberg que recibió la información a través de Damian Lyons-Lowe, responsable de una compañía de encuestas llamada Survation. “Lo hizo bien y, cualesquiera que fueran los hedge funds que le pagaron ese día (por tener su encuesta), lo hicieron muy bien”, matizó.

placeholder Donald Trump observa a Nigel Farage durante su intervención en una acto de campaña en Jackson, EEUU. (Reuters)
Donald Trump observa a Nigel Farage durante su intervención en una acto de campaña en Jackson, EEUU. (Reuters)

En cualquier caso, el líder euroescéptico aseguró que la conversación no se produjo hasta pasadas las 22.00 horas, cuando cerraron las urnas. “Hacerlo antes habría estado mal en todos los niveles. Mal por mi parte y por la suya. Simplemente habría estado mal”, matizó. La primera entrevista que Farage concedió a Sky fue a las 21.40 horas, aunque la televisión no la emitió hasta que se cerraron las urnas a las 22.00 horas. El político, 70 minutos después, volvió a conceder una entrevista a Press Association, en la que volvió a recalcar que el Remain finalmente ganaría.

“Estoy tranquilo y racional. Si estoy equivocado, estaría encantado. Pero ahora es lo que creo después de haber hablado con algunos de mis amigos en los mercados financieros que han realizado grandes encuestas”, matizó. Bloomberg envió una serie de titulares de esa entrevista a sus más de 300.000 clientes financieros de todo el mundo. La libra siguió subiendo antes de explotar.

La pregunta es: ¿cómo Survation predijo el triunfo del Brexit cuando el resto de compañías de encuestas apostaban por lo contrario? Su fundador, Lyons-Lowe, trabajó en un hegde fund antes de crear la empresa en 2010. En un principio, se dedicó a medir el apoyo del público a los concursantes del programa de televisión de Factor X. Pero luego pasó al ámbito de la política y cuando sus sondeos empezaron a dar impulso al voto euroescéptico, a Farage se le despertó un gran interés por conocerle.

“Aprendí más en un almuerzo con él sobre las encuestas de lo que había aprendido en 20 años”, llegó a decir el líder del UKIP tras su primera reunión con Lyons-Lowe, celebrada en 2013. Entre ambos surgió tal amistad que los operadores telefónicos de Survation llegaron a trasladarse en la sede del UKIP. “Es un genio con defectos, pero es un genio”, recalcó Farage.

Foto: Manifestantes antiBrexit durante una protesta ante el Parlamento británico, en Londres, el 30 de abril de 2018. (Reuters)

Para el momento del referéndum, la base de datos y conocimientos sobre la campaña euroescéptica de la compañía de encuestas era mayor que cualquier otra pudiendo establecer algoritmos que anticipaban lo que nadie logró (o quiso) ver. En cualquier caso, Survation no fue la única que vendió sus datos a los fondos de inversión de la City. Al menos, YouGov, ICM, BMG, ComRes y Populus también lo hicieron según la exhaustiva investigación de Bloomberg.

Previamente, las empresas de sondeos habían utilizado ya el mismo modos operandi durante el referéndum de independencia que Escocia celebró en 2014. Y es que, a diferencia de las elecciones generales, los plebiscitos dan más margen de maniobra a los hedge fund porque no hay encuestas a pie de urna una vez el reloj marca las 22.00 horas. En los comicios normales, hay una encuesta oficial de salida -basada en 20.000 entrevistas personales- que es financiada conjuntamente por la BBC, Sky e ITV. Este sondeo, que se publica en cuanto el Big Ben marca la hora en la que se cierran los colegios electorales, ha anticipado correctamente los resultados de las últimas cuatro elecciones generales celebradas en el país.

El creador de este sondeo es un profesor escocés de 64 años llamado John Curtice, considerado una eminencia. Es respetado tanto en los círculos mediáticos como en los políticos. Tanto para el referéndum de Escocia como para el del Brexit, el académico explicó que no podía realizar una encuesta fiable, ya que sus modelos predictivos se basaban en un voto comparable y los escenarios de los plebiscitos no tenían precedente.

Curtice es presidente del British Polling Council, un organismo autorregulado que cuenta entre sus miembros con YouGov, Survation, ICM y los otros principales encuestadores del país. En el referéndum del Brexit, al no tener que hacer el sondeo oficial para las cadenas de televisión, las compañías vieron vía libre para poder ofrecer sus servicios a los hedge fund, incluido el propio Curtice.

placeholder Manifestantes antiBrexit de la plataforma 'People's Vote' marchan por el centro de Londres. (Reuters)
Manifestantes antiBrexit de la plataforma 'People's Vote' marchan por el centro de Londres. (Reuters)

El académico colaboró con Rokos Capital Management para “discutir el modelo de encuesta” que el fondo de inversión utilizaría para el 23 de junio. Su función principal era ayudar a construir un sistema que permitiera predecir el posible resultado de la votación a medida que se iban informando los resultados en los distintos distritos. Con todo, el escocés asegura que fueron sólo un “par de llamadas” y que aquella noche ni condujo la encuesta ni ayudó a analizar los resultados que iban saliendo.

Por su parte, otro colaborador del reputado académico, Steve Fisher, profesor asociado en la Universidad de Oxford, ayudó a Survation a diseñar la encuesta que se vendería luego en la City.

En el Reino Unido, es un crimen “publicar” cualquier resultado de un sondeo a pie de urna antes de las 22.00 horas y con “publicar” la ley especifica facilitar información “al público en general, o cualquier sección del público, en cualquier forma y por cualquier medio”. La pena son hasta seis meses en prisión y una multa potencialmente ilimitada. Pero ninguna ley prohíbe que los datos se transmitan directamente a instituciones de la City con fines comerciales por lo que existe una zona gris abierta a interpretaciones. Hasta la fecha, nunca nadie ha sido castigado por la normativa.

En el caso de YouGov, se concluyó que un solo hedge fund no podía considerarse “una sección del público”, pero varios con la misma encuesta ya cruzaban la línea. Así que se vendieron los datos a sólo un fondo de inversión. Eso sí, por el módico precio de un millón de dólares. Posteriormente, de forma gratuita, se dió la misma encuesta a Sky News.

Survation no fue la única que vendió sus datos a los fondos de inversión de la City. Al menos, YouGov, ICM, BMG, ComRes y Populus también lo hicieron

Al cerrarse la urnas, la televisión publicó el sondeo que apostaba por la permanencia. Los mercados empezaron a reaccionar, pero un hedge fund de la City ya tenía previamente esos datos y compró la libra a un precio que minutos después era ya muy superior.

Todo el mercado iba en la misma dirección. El efecto de pensamiento grupal es lo que en la City se resume como: “mantener a los cerdos hambrientos”. Sólo había que esperar a vender. Aunque la encuesta luego demostró estar equivocada no importó. El negocio ya estaba hecho.

Por su parte, Populus realizó un sondeos para Michael Ashcroft, el ex vicepresidente multimillonario del Partido Conservador, que administra un banco en Belice. El fundador de Populus es Andrew Cooper, exdirector de estrategia de David Cameron.

Al menos otros seis fondos de inversión compraron encuestas para el Brexit, incluyendo Arrowgrass Capital Partners, Element Capital, Maven, PointState y TSE Capital Management. Al menos tres más -North Asset Management, SPX Capital y Vigilant- estaban tratando de obtener información aunque no está claro cuál terminó comprando sondeos. Todos se han negado a hacer comentarios.

Aprovechando la ola de volatilidad política del mercado derivada del descontento de los votantes en todo el mundo, algunas compañías de encuestas han intentado replicar su éxito más allá del Reino Unido. Survation, por ejemplo, trabajó para firmas de servicios financieros en las elecciones italianas de marzo, donde hubo gran protagonismo de las fuerzas euroescépticas.

Aunque el suelo británico se convierte, de nuevo, en un escenario tremendamente atractivo con lobbys pro UE -alguno financiado por George Soros- presionando para un nuevo plebiscito. Las compañías de encuestas están ya esperando nuevas llamadas de la City.

La actividad en las oficinas de la City fue frenética aquella noche del 23 al 24 de junio de 2016. Nadie durmió. Los sondeos apostaban por la permanencia, pero pasadas las 4.39 de la madrugada, las palabras del veterano periodista de la BBC, David Dimbleby, retumbaron en todo el país: “Estamos fuera”. El triunfo del Brexitempujó la libra hacia un acantilado. Fue la mayor caída de divisa desde el nacimiento del sistema financiero global moderno. Trillones de dólares en valores de activos se evaporaron en cuestión de segundos. Sin embargo, algunos hedge funds ganaron mucho, muchísimo dinero.

Brexit Nigel Farage Reino Unido Hedge funds George Soros
El redactor recomienda