Rescatan a un monje budista después de días encerrado en una cueva inundada

Phra Ajarn Manas es un monje budista de 46 años que estaba llevando a cabo una peregrinación hasta la provincia de Phitsanulok, en el norte de Tailandia. El sábado 3 de abril entró en la cueva de Phra Sai Ngam para meditar, pero se desató una fuerte tormenta y el agua no dejó de caer durante días, dejándole atrapado en su refugio.

Aunque no es época de tormentas en la zona, el temporal estuvo descargando agua sin parar desde el domingo hasta el marte, lo que inundó parte de la cueva en la que se había alojado el monje. Por eso, cuando fue a salir, fue tarea imposible, por lo que se tuvo que poner en marcha un servicio de rescate al temer por su vida.

Los encargados de entrar a por el monje lo intentaron por primera vez el martes por la tarde, pero la operación de rescate tuvo que ser suspendida después de casi una hora ya que el nivel del agua volvió a aumentar. Por eso, regresaron al día siguiente, cuando pudieron llegar hasta el monje y hacerle un primer análisis de su estado de salud.

Finalmente, el monje fue rescatado el miércoles sano y salvo. En el operativo participaron un total de 17 buzos y uno de ellos confirmó a la CNN que el budista se encontraba en buen estado tras ser liberado.

La noticia ha recordado los sucesos de 2018, cuando un equipo de fútbol compuesto por un entrenador y 12 niños quedaron encerrados en una cueva inundada en Chiang Rai, hasta que pudieron ser rescatados.