Ejecuciones con gas nitrógeno: ¿por qué EEUU recurre a nuevos métodos para aplicar la pena de muerte?

Este jueves, el estado de Alabama (Estados Unidos) marcó un punto de inflexión en relación con la pena de muerte en el país: por primera vez se ejecutó a un preso, Eugene Smith, asfixiado con gas nitrógeno, un método que nunca antes se había utilizado y que ha activado las alertas.

"Esta noche Alabama hace que la humanidad de un paso atrás". Fueron las últimas palabras que dijo Smith, condenado a muerte por asesinar a una mujer por encargo en 1988, antes de morir tras inhalar el gas nitrógeno a través de una máscara, lo que provocó que se quedara sin oxígeno.

Curiosamente, esta no era la primera vez que habían intentado ejecutarle. En noviembre de 2022 lo intentaron mediante una inyección letal por vías intravenosas, pero como los funcionarios fueron incapaces de encontrarle la vena, se canceló la ejecución y se comprometieron a no volver a usar este método. Sin embargo, abría las puertas a usar otros.

El método escogido para cumplir con la pena de muerte fue sometido a escrutinio de la población y de organismos internacionales. Aunque organizaciones como Amnistía Internacional o Human Rights Watch solicitaron que no se utilizara. Incluso la ONU, a través del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, advirtió que podría "vulnerar la prohibición de la tortura y otros castigos crueles, inhumanos y degradantes".

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Aun así, el Tribunal Supremo de Estados Unidos rechazó, minutos antes, el recurso presentado por la defensa del condenado para paralizar la ejecución. "Alabama lo ha elegido como su conejillo de indias", afirmó Sonia Sotomayor, una de las tres juezas que votó en contra del método.

Problemas con la pena de muerte y la inyección letal

La pena de muerte fue aprobada en 1976 por el Tribunal Supremo de EEUU. Desde entonces, han sido ejecutados 1.583 presos y está aprobada en 27 de los 50 estados. Sin embargo, no todos utilizan los mismos procedimientos. Aunque la inyección letal es el más utilizado, hay otros autorizados como la electrocución o el pelotón de fusilamiento, aprobado en Carolina del Sur en 2021.

Debido a las dificultades para adquirir los fármacos necesarios, por la negativa de venderlo por parte de las farmacéuticas, para encontrar las venas o con agujas que se desconectan, muchos estados han tenido que buscar otras alternativas a la inyección letal.

Las complicaciones en varias ejecuciones en la última década han hecho que se cuestione este método al considerarse "inhumano"

Aunque la técnica del gas nitrógeno está aprobada también en Misisipi y Oklahoma, Alabama es el primer estado en realizar una ejecución de esta forma. Se trata de un proceso por el que se coloca una máscara al reo y se pone nitrógeno en vez de oxígeno, lo que provoca la asfixia, aunque también puede dar lugar a mareos, náuseas o pérdidas de conocimiento.

Las complicaciones surgidas en varias ejecuciones en la última década en Estados Unidos han hecho que se cuestione el método por ser considerado "inhumano" y que haya sido objeto de disputas legales. Ahora, este caso podría haber sentado un precedente y otros estados podrían tomar como ejemplo la ejecución de Smith para introducir ellos también este método.