Lo que este diputado con guirnalda de frutas te cuenta del problema de la Francia del futuro

En mayo de 1989, Emmanuel Tjibaou estaba viendo la televisión en su casa de Nueva Caledonia cuando se enteró de la muerte de su padre Jean-Marie a través de las noticias. El líder del movimiento independentista del territorio francés en el Pacífico Sur fue asesinado por un opositor político después de que liderara unos acuerdos para acabar con el conflicto entre los separatistas y los leales a París. Emmanuel tenía 13 años en ese momento y, a sus 48, se ha convertido en el primer diputado independentista elegido en las últimas décadas.

Tjibaou, que deberá formar parte de los diputados apoyados por el Nuevo Frente Popular, obtuvo el 57,44% de los votos en el segundo distrito electoral de Nueva Caledonia en la segunda vuelta de las elecciones legislativas francesas. Hasta hace pocas semanas, no se había sentido seducido por la política, pero los recientes disturbios en Numea, la capital, le empujaron a dar el paso. "Me duele volver a ver hoy las mismas imágenes que en 1980 (cuando se registraron los enfrentamientos más violentos de la historia del país). Hemos retrocedido 30 años después de construir la paz", afirma.

Vestido con una camisa estampada y una corona de frutas alrededor de su cuello en un acto después de los comicios legislativos, Tjibaou se describe como un "hijo de los acontecimientos" que marcaron la historia de su pueblo y que se encuentra en un nuevo punto de inflexión. El pasado mes de mayo estallaron las protestas en Nueva Caledonia por una reforma electoral que concede el voto a aquellos ciudadanos franceses que lleven al menos 10 años viviendo en el territorio. Para los kanak, el pueblo autóctono que representa cerca del 40% de la población de la isla, la decisión es una forma de "colonización electoral" que menoscaba su poder político y ansiada independencia. Después de que fuera aprobada el Parlamento francés, Emmanuel Macron decidió paralizarla por el recrudecimiento de la crisis en la que murieron 10 personas y se contabilizaron graves daños materiales.

El futuro diputado de la nueva legislatura francesa, cuyo hermano estuvo en prisión preventiva en junio por su presunto papel en los disturbios, no tiene experiencia en política y no ha sido respaldado de forma oficial por el independentista del Frente de Liberación Nacional Canaco y Socialista (FLNKS), si bien ha recibido el apoyo de sus miembros. "Es un momento histórico para nosotros. Tener este resultado de manera democrática, a través de las urnas, demuestra que estamos en el camino de la independencia", señaló Jimmy Naouna, portavoz de la formación.

TE PUEDE INTERESAR

Una isla arde por 40.000 votos: el 'procés' del Pacífico le estalla a Francia en la cara

Javier Brandoli. Sudeste Asiático

Tjibaou es conocido por su trabajo para promover la cultura de los pueblos indígenas de Nueva Caledonia y su victoria electoral pone de relieve la movilización de una nueva generación del país. "Es un golpe duro para el Gobierno francés y el movimiento 'lealista' en Nueva Caledonia", explica Nic Maclellan, periodista en las islas del Pacífico y experto en la historia del territorio.

Aunque les separan más de 16.000 kilómetros, Nueva Caledonia es una pieza central para Emmanuel Macron, que quiere aumentar la influencia francesa en el Pacífico. La elección de un diputado independentista es una muestra más de que el poder de París de ultramar se resquebraja. Su ascendencia sobre sus viejas colonias africanas ha prácticamente desaparecido y sus territorios en los Mares del Sur estallaron en las revueltas que obligaron a decretar el estado de emergencia y que han evidenciado que el deseo de independencia está lejos de evaporarse.

A pesar de que la elección de Emmanuel Tjibaou como diputado no tiene una consecuencia directa en la política nacional, sí es un indicador de que el proceso independentista en esta zona le puede volver a explotar a Francia en la cara. La única buena noticia para París en este sentido es que el activista indígena ha condenado el periodo de inestabilidad, que calificó como “dramático”. “Hay una necesidad urgente de 'restaurar las condiciones' para un diálogo renovado entre los partidos pro-independencia y pro-Francia”, dijo.

Esta posición ha sido celebrada por el otro diputado elegido en Nueva Caledonia, en este caso, en el primer distrito. El derechista Nicolas Metzdorf está en contra del movimiento que apuesta por desvincularse políticamente de Francia y se ha mostrado a favor de la reforma electoral que ha provocado la ira entre la sociedad y el origen de los disturbios. "Es alguien con quien podemos hablar, un demócrata. Ahora queda por ver si Tjibaou podrá hacer oír su postura moderada ante su estructura política en general", dijo.

Hay un mensaje para París

Las elecciones legislativas pueden cambiar el equilibrio de poder en las discusiones sobre el futuro de un territorio que continúa siendo foco de inestabilidad. Han pasado semanas desde que estallaron los disturbios, pero en algunas calles todavía hay barricadas en pie. A finales de junio, una estación de policía y un edificio del ayuntamiento fueron incendiados después de que siete activistas independentistas vinculados a un grupo acusado de orquestar los disturbios del mes pasado fueran arrestados y trasladados a Francia. El Gobierno de Macron trasladó a una unidad de policías para restablecer el orden en el territorio y miles de agentes siguen desplegados en el terreno para garantizar la seguridad en las calles antes y durante la jornada electoral.

Normalmente, las elecciones legislativas francesas tienen un impacto menor en la sociedad de Nueva Caledonia. En los comicios parlamentarios de 2022, la participación fue del 32%, frente al 36% de 2017. Esto es especialmente evidente entre los votantes independentistas, debido a los cambios en los límites electorales realizados en 1986 que minimizaron el voto kanak en ambos distritos electorales del territorio y los disuadieron de votar. Desde entonces, ningún candidato independentista había logrado ser elegido para la Asamblea Nacional.

En estos comicios, sin embargo, el descontento social ha llevado a un aumento significativo de la participación. En la primera circunscripción de Nueva Caledonia votó el 69% de los ciudadanos censados, mientras que en la segunda circunscripción esa cifra llegó al 72%. Esta cifra se ha interpretado a menudo como una voluntad de enviar una señal a París, no tanto sobre las cuestiones internas sino sobre un referéndum a favor o en contra de la independencia.

Las legislativas se han enmarcado en un momento en que los dos lados del electorado están descontentos. La reforma electoral votada en el Parlamento francés fue el punto de partida para el enfado de los independentistas, pero la parte de la sociedad que está a favor de pertenecer a Francia están resentidos con Macron porque sienten que el presidente ha tenido cierta responsabilidad en la crisis y que París los ha abandonado en un momento de necesidad.

TE PUEDE INTERESAR

Habla el Gobierno isleño que busca separarse de París: "Francia va a tener muchos problemas"

Lucas Proto

Roch Wamytan, una destacada figura independentista y actual presidente del Congreso local de Nueva Caledonia, dijo que estas elecciones son clave para el futuro del país porque la sociedad ha demostrado que "los votantes eran partidarios de la expresión democrática". "Ahora tenemos un punto más de influencia a nivel nacional", añadió al medio neozelandés RNZ.

Nueva Caledonia ha celebrado tres referéndums, el último en 2021, en el que el rechazo a la secesión venció con un arrollador 96% de los votos, pero con una participación de apenas un 40%. Esta última consulta no la reconocen como válida los movimientos independentistas kanak, que boicotearon la votación alegando que no debería haberse celebrado en plena pandemia.

"Quieren otro referéndum bajo auspicios internacionales", explicaba en enero de 2024 la diplomática australiana Denise Fisher en un análisis publicado en el Lowy Institute que aventuraba lo que está ahora sucediendo. El presidente francés, Emmanuel Macron, sí celebró la trilogía de triunfos que ponía fin al escenario de incertidumbre ante el que París pretendía pasar página. “Hoy Francia es más bella porque Nueva Caledonia ha decidido permanecer en ella”, dijo. Unas declaraciones que no representan a una parte importante de la sociedad isleña, que ha enviado el claro mensaje a París de que seguirá presionando por la independencia.

Emmanuel Tjibaou se ha convertido en el primer candidato independentista en ganar un escaño en la Asamblea Nacional desde 1986. Ahora, debe responder a los reclamos políticos del movimiento secesionista con la importante —y pesada— herencia de un padre que firmó los Acuerdos de Matignon de 1988 con Francia, trayendo un período de paz al archipiélago después de cuatro años de casi guerra civil.