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Más doctoras, pero en precario
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Más doctoras, pero en precario

La feminización de las profesiones sanitarias de nivel superior es un hecho, es decir, tenemos más doctoras en España. Sin embargo, este proceso ha venido acompañado

La feminización de las profesiones sanitarias de nivel superior es un hecho, es decir, tenemos más doctoras en España. Sin embargo, este proceso ha venido acompañado de un aumento importante en la precariedad laboral a través de sucesivas bajas laborales y contratos temporales intermitentes, tal y como demuestra un estudio de la Fundación de Estudios de Economía Aplicada (FEDEA). Aunque parezca mentira, este fenómeno presenta cierto paralelismo con las relaciones laborales en sectores de trabajo no cualificado como la construcción o la agricultura.

Además, según el citado estudio suscrito por los economistas Juan J. Dolado y Florentino Felgueroso, mientras los países escandinavos y el Reino Unido tienen escasez de personal sanitario, España se ha caracterizado recientemente por ser a la vez exportadora e importadora de dicha mano de obra: “Este hecho, aparentemente paradójico, se parece a los flujos migratorios de los trabajadores de la vendimia, con la importante diferencia de que tiene lugar en mercados de trabajo cualificado”.

La feminización de la Sanidad se basa en buena medida a la reducción por parte de los varones de la demanda educativa de este tipo de estudios, es decir, una menor matriculación en las facultades de Medicina. Esas mujeres con titulación superior se han incorporado, mayoritariamente, al sector público, el mayor empleador de la Sanidad. Y en el sector público, las tasas de temporalidad prácticamente doblan a las del sector privado. Por ello, la tasa de temporalidad de las mujeres duplica a las de los varones en ambos sectores.

Contratación temporal y pluriempleo

La contratación temporal es la clave para entender las diferencias de género en el colectivo de los profesionales superiores de la Sanidad, dentro de un contexto en el que existe una elevada tasa de pluriempleo tanto en el sector público como en el sector privado (el aumento del empleo de los asalariados del sector privado se ha duplicado en la última década). El sector público representa en la actualidad un 66% del empleo equivalente a tiempo completo de los médicos, frente al 11% y al 23% del empleo de los asalariados en el sector privado y los autónomos, respectivamente.

Como venimos diciendo, en el sector público existe una mayor incidencia y aumento de la feminización de los niveles profesionales superiores: un 45% de los médicos del sector eran mujeres en 2006, 13 puntos más que en 1994. Sin embargo, se ha registrado un aumento de tasa de temporalidad. En el caso de las mujeres, estas tasas han seguido una tendencia creciente en los últimos 10 años, superiores al 40% en 2006 frente al 18% de los varones.

La causa más común de esta temporalidad son las ‘bajas no voluntarias’ asociadas con la finalización de un contrato de trabajo, una media de 12 bajas por persona a lo largo de la vida laboral, en el caso de los hombres, y 15,6 bajas por persona en el caso de las féminas. Los varones tienen, por el contrario, un mayor número de ‘bajas voluntarias’ originadas por cambios de empresa.

Determinación del salario

La determinación del salario de los profesionales sanitarios en España difiere en el sector público y el privado. En el caso del primero, se negocian en los distintos servicios de salud de las comunidades autónomas y, en el segundo, según los convenios colectivos provinciales.

En ambos casos, aunque no se observen diferencias sustanciales en los salarios base por hora entre hombres y mujeres, estas diferencias se amplían cuando se estudian periodos más largos de percepción de los salarios. Es decir, los salarios de las mujeres vienen afectados en mayor medida por los días no trabajados debido a la intermitencia de los contratos.

La feminización de las profesiones sanitarias de nivel superior es un hecho, es decir, tenemos más doctoras en España. Sin embargo, este proceso ha venido acompañado de un aumento importante en la precariedad laboral a través de sucesivas bajas laborales y contratos temporales intermitentes, tal y como demuestra un estudio de la Fundación de Estudios de Economía Aplicada (FEDEA). Aunque parezca mentira, este fenómeno presenta cierto paralelismo con las relaciones laborales en sectores de trabajo no cualificado como la construcción o la agricultura.

Ministerio de Sanidad