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iPhone 4, el nuevo killer
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iPhone 4, el nuevo killer

Steve Jobs salta al escenario puntual como un reloj. Se respira tensión en el ambiente y Twitter habla un solo idioma. El poder de Apple en

Foto: iPhone 4, el nuevo killer
iPhone 4, el nuevo killer

Steve Jobs salta al escenario puntual como un reloj. Se respira tensión en el ambiente y Twitter habla un solo idioma. El poder de Apple en la red se hace notar y el fabricante sigue a rajatabla su inequívoca estética: oscuro el escenario, música de inicio y Jobs con la misma indumentaria de siempre. Los primeros compases de la presentación son ya un déjà vu para muchos: un baile de cifras que en este caso, apabullan por su contundencia. Apple recoge lo sembrado con el iPad y 'vende' las cifras como pocos fabricantes. Curiosamente, Jobs centra el grueso de la apertura en la venta de aplicaciones más que en el arrollador éxito de ventas del iPad. No es para menos. El 'zarpazo' del iPad se lleva en pocas semanas el 22% de la venta mundial de libros electrónicos y esto no ha hecho más que empezar.

Apple eleva el listón

Pero la esencia de la presentación no se hizo esperar y tras el breve baile de cifras y autobombo, Jobs presenta el iPhone más anticipado en la historia de la compañía. Como podrán apreciar en las fotos, es el mismo terminal que un empleado de Apple perdió en una noche de juerga. Aunque no es el apartado estético lo que más destaque del nuevo móvil de los californianos. Apple ha vitaminado el dispositivo de tal forma que no queda prácticamente ninguna función ni parte del móvil predecesor que no haya sufrido los rigores del lifting. Las mejoras son numerosas y comienzan por sus entrañas: el nuevo iPhone hereda del iPad el poderoso procesador A4 que aportará una notable mejora no sólo en el rendimiento general, sino también en la duración de la batería. Este es precisamente otro de los flancos que ha cerrado por fin Apple: las críticas a la escasa duración de la batería persiguen al móvil desde su lanzamiento, y parece que con el iPhone 4 se soluciona, sobre el papel, este apartado. El fabricante ha sabido además, aumentar la batería reduciendo al mismo tiempo el grosor del móvil hasta un 24% con respecto al modelo anterior y ostentando el récord de ser el "móvil más fino del planeta".

Era un secreto a voces, y por fin se ha confirmado: el nuevo iPhone cuenta con una cámara frontal para las videollamadas. No es el primer móvil en el mercado que la equipa, desde luego, pero si nos atenemos al efecto tractor de Apple, a buen seguro, nos acostumbraremos a ver gente efectuando llamadas de vídeo por la calle. También parece haberse escuchado a los usuarios en lo tocante a la cámara de fotos, que sube su sensor a los 5 megapíxels y equipa por fin, un flash LED. Y si antes hablábamos de récords, Apple vuelve a sacar pecho al presentar en el dispositivo una pantalla vitaminada que ellos mismos han bautizado como "Retina Display" y cuya densidad de pixels supera a la que es capaz de apreciar la retina humana, algo que se traduce en una nitidez y profundidad de colores que sitúan al equipo de Apple en la vanguardia de la telefonía una vez más.

Habemus nuevo iPhone y pasado el efecto hipnótico de toda presentación de Apple, uno no puede evitar cierta sensación agridulce. No cabe duda de que el equipo de Steve Jobs ha vuelto a mejorar el móvil de referencia del momento, pero con funciones, que en buena medida, hemos visto ya en otros terminales del mercado. ¿Excesivas expectativas en torno a Apple? Es posible. Tal vez no sea el móvil más avanzado y completo del mercado, pero es el mejor iPhone, y este puede ser un argumento suficiente para reinar en el Olimpo de los móviles hasta la llegada de su sucesor. España queda fuera, en esta ocasión, de la lista de los primeros países en el mundo que contarán con el nuevo móvil de la casa, y habrá que esperar al menos hasta julio para poder comprarlo.

Steve Jobs salta al escenario puntual como un reloj. Se respira tensión en el ambiente y Twitter habla un solo idioma. El poder de Apple en la red se hace notar y el fabricante sigue a rajatabla su inequívoca estética: oscuro el escenario, música de inicio y Jobs con la misma indumentaria de siempre. Los primeros compases de la presentación son ya un déjà vu para muchos: un baile de cifras que en este caso, apabullan por su contundencia. Apple recoge lo sembrado con el iPad y 'vende' las cifras como pocos fabricantes. Curiosamente, Jobs centra el grueso de la apertura en la venta de aplicaciones más que en el arrollador éxito de ventas del iPad. No es para menos. El 'zarpazo' del iPad se lleva en pocas semanas el 22% de la venta mundial de libros electrónicos y esto no ha hecho más que empezar.

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