¿Corre peligro la Velada del Año de Ibai Llanos en el Bernabéu? La multa a la que se podría enfrentar

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El 13 de julio se celebra uno de los eventos más esperados del año, y el más grande de internet, La Velada del año 4. Se trata de una velada deportiva de boxeo promovida por Ibai Llanos, uno de los streamers más grandes de Twitch, la plataforma de Amazon que permite realizar retransmisiones en directo.

Se trata de la cuarta vez que lo realiza, teniendo la tercera a más de tres millones y medio de espectadores atentos a los combates. La velada ha ido creciendo en magnitud, pasando de celebrarse en una nave en Barcelona, en su primera edición, al estadio del Santiago Bernabéu, en la próxima.

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El evento, que es concebido por todo lo alto, no solo consta de combates de boxeo entre streamers o youtubers (como Viruzz o Peldanyos), sino que también habrá actuaciones en directo de artistas de primera línea como Bizarrap, Julieta Venegas, Nicky Jam o Young Miko.

Crece la tensión en torno al estadio

Sin embargo, debido a las últimas sanciones que ha recibido el estadio tras los conciertos de Taylor Swift, podría estar en peligro. Y es que el estadio del Real Madrid no ha cumplido con la normativa de ruido impuesta por la Delegación de Urbanismo de Madrid.

El delegado de Urbanismo, Medio Ambiente y Movilidad, Borja Carabante, ha llamado la atención al Real Madrid (encargado de gestionar el estadio y sus eventos). El último concierto de Taylor Swift concluyó con 20 sanciones por ruido, que pueden elevar la multa impuesta al estadio hasta los 40.000 euros.

Carabante ha considerado ‘urgente’ que se adopten inmediatamente “medidas minimizadoras del ruido para conciliar la necesidad de que en Madrid haya grandes eventos y siga siendo la capital cultural y musical de Europa con el descanso de los vecinos”, según Europa Press.

El problema principal es que el estadio ya tuvo varios avisos tras el primero concierto de Swift, ocurrido el miércoles 29 de mayo. Al acumular más sanciones el día siguiente, 30 de mayo, segundo concierto consecutivo de la artista estadounidense, estamos hablando de reincidencia en el incumplimiento de la normativa, lo que está incrementando la tensión. De seguir así, tal vez la policía pueda verse obligada a prohibir al estadio continuar con su programa de eventos.