Apple alucinó a la gente con esta IA. Samsung ya la tiene y explica lo que está en juego

En la pasada WWDC de junio, Apple dedicó buena parte del tiempo a deshojar la margarita y hablar por fin de qué pretendía hacer con la tecnología de moda, la inteligencia artificial generativa. Hubo mucha tela que cortar, ya que sus rivales llevaban meses poniendo sobre la mesa un goteo constante e incesante de herramientas de esta naturaleza.

Siri, los iPhone, los MacBook y los iPad serán regados con las virtudes de estos desarrollos. Eso es decir mucho. Entre la multitud de ejemplos que mostraron durante la keynote, hubo uno que causó mucho revuelo y asombro. En una esquina de un bloc de notas había un esbozo de una especie de minarete. Unos trazos que se convertían en una ilustración trabajadísima solo con pedírselo a la inteligencia artificial de turno.

El problema es que esta función no tiene fecha de estreno. Se sabe que en EEUU los propietarios de un iPhone 15 podrán utilizar alguna función de Apple Intelligence a partir de septiembre, pero no se sabe si esta u otra. La fecha es todavía más difusa a este lado del Atlántico. Los de Cupertino han decidido no lanzar de momento nada que tenga que ver con su IA generativa en la UE por temas relacionados con la regulación.

Alguien se adelanta

Sin embargo, hay alguien que ya tiene esta herramienta en funcionamiento. O una muy parecida. Se trata de Samsung, que esta semana ha presentado sus nuevos teléfonos plegables, una batería de accesorios (entre ellos, un anillo inteligente) así como herramientas basadas en esta tecnología. Ya había lanzado varias el pasado mes de febrero cuando presentó los Galaxy S24. Ahora las amplía y las lleva más allá.

Y lo hace con un sistema de respuestas rápidas que es capaz de analizar tus mensajes y tu forma de escribir para adaptarse al tono o el destinatario. Lo hace con un sistema que, seleccionando una fórmula matemática en una captura de pantalla, es capaz de resolverla en unos pocos segundos. Lo hace también con un asistente de redacción o con una herramienta que te transcribe directamente audios en tus notas y apuntes.

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Pero también hay mucho en la edición y creación de imágenes. Ya vimos a principios de año las opciones de borrar personas u objetos de las fotos y restaurarlas para hacer parecer que nunca estuvieron allí. También vimos cómo una foto se podía estirar y el sistema se inventaba las partes que no estaban en la imagen original con bastante lógica y acierto.

Ahora los Fold Z6 y los Flip Z6 son capaces de convertir unos trazos que hacemos con el dedo en la pantalla (también con un puntero) en un objeto fotorrealista o una ilustración en diversos estilos en un abrir y cerrar de ojos.

Hay dos maneras de utilizar esta función. Una de ellas es directamente en imágenes que hayamos tomado con la cámara o que tengamos en nuestro álbum de fotos. A continuación, pueden ver un par de ejemplos. En el primero se ha añadido una nube en un cielo despejado y en el segundo una vela en una tarta de cumpleaños. La verdad es que en ambos casos ha logrado un resultado pintón que de un vistazo sería difícil distinguir si es un elemento real o generado a posteriori.

Esta herramienta tiene sus límites. Por ejemplo, está capada para introducir elementos que modifiquen la cara de las personas. Probé en repetidas ocasiones a pintar un bigote o unas gafas en la cara de una joven. En todas el mismo resultado, intentaba procesar mi petición y mostraba un mensaje de error.

También hay veces que le cuesta dibujar dos elementos independientes al mismo tiempo y suele tender a identificarlos como un único objeto. En definitiva, cabe mencionar que en muchos casos lo fino que sea el resultado final depende de tu talento para representar gráficamente lo que tienes en la cabeza. No es mi caso, donde alguno de los bocetos parecían salidos de una partida al Pictionary después de seis latas de cerveza.

La otra forma de utilizar estas capacidades es creando un boceto de cero. Lo haces con una aplicación de dibujo que se despliega fácilmente desde el lateral. Se puede graduar la transparencia del fondo por si lo que queremos es copiar algún dibujo, como si de papel cebolla se tratase porque no somos muy diestros dando forma a esto o a aquello.

Una vez lo tengamos listo, podemos escoger una variedad de estilos. La verdad es que los resultados son bastante llamativos y pintones, tal y como se puede ver en los diferentes ejemplos. Seguro que más de uno le encuentra utilidad a esta opción. Una opción que también tiene límites, porque supuestamente está vetada para crear ilustraciones con contenido sexual o violento.

El ganador de todo esto: Google

Aunque Samsung es la primera en tener esta función lista, lo cierto es que no es un desarrollo suyo como tal. Se ha creado gracias a tecnología de Google, que se ha convertido, una vez más, en su pareja de baile predilecta. Aunque en su momento, Samsung habló de una integración de IA abierta con múltiples proveedores, lo cierto es que han estrechado lazos con los de Mountain View. Una prueba de esta integración profunda es que ahora se podrá utilizar el comando de OK, Google para convocar a Gemini, el chatbot del buscador, desde cualquier parte del terminal.

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Con este movimiento, Google se apunta una victoria y consigue meter su IA hasta el fondo de varios teléfonos del mayor fabricante del mundo. OpenAI le había ganado esa batalla con Apple Intelligence, donde funcionará como un bastón del nuevo Siri. Esa es la gran batalla que se está jugando ahora: tener el máximo de ventanas posibles para que estas herramientas ganen en número de usuarios y ganen también en personas activas que den feedback con el uso diario de estas herramientas para seguir alimentándolas y entrenándolas.

Google ha integrado su tecnología también en los últimos Motorolas plegables, aunque esa asociación no parece tan profunda como la de los coreanos. Con esto despeja dudas y tapa ciertas fugas como la de Honor, que optó por los modelos de Meta. Ya no es tener la batalla por la IA más lista, también la más utilizada.