Descubren por qué los adorables wombats hacen heces en forma de cubo
Una universidad norteamericana ha desvelado el misterio: se crean gracias a una variación de tensión en sus paredes intestinales
Son como grandes peluches, adorables marsupiales que suelen medir un metro de largo, pero que destacan por sus patitas diminutas. Hasta ahora, estos animales australianos guardaban un secreto: la forma cúbica de sus deposiciones. Ahora, la ciencia ha descubierto cómo son capaces de hacer cacas con formas cuadradas y, aún más importante, por qué.
Un estudio publicado en el American Physical Society desvela que los wombats son animales que tienen muy poca vista, por lo que utilizan sus heces para dos fines: por un lado, para atraer con su olor a otros ejemplares de su especie; por otro, y más importante aún, amontonarlas para que sean visibles desde lo más lejos posible. Si sus cacas no fueran consistentes y, además, de forma cúbica, no podrían acometer este objetivo ya que se esparcirían.
La directora del estudio, Patricia Yang, de la Universidad de Georgia en Estados Unidos, siempre había sentido curiosidad por estos animales: “Nunca había visto nada tan extraño en biología. Era un misterio y ni siquiera creía que fuera cierto. Lo busqué en Google y vi mucho sobre las cacas cuadradas de los wombats, pero era muy escéptica”.
Sin embargo, aprovecharon ejemplares que habían muerto en accidentes de tráfico en Australia para investigar sus tractos digestivos. Ahí consiguieron entender cómo son capaces de ‘fabricar’ heces cúbicas: gracias a la elasticidad de sus paredes intestinales. Yang y su equipo comprobaron cómo las heces pasaban de un estado líquido a uno sólido en el extremo del intestino, formando pequeños cubos de unos dos centímetros de largo.
La variación que se produce en la tensión de las paredes intestinales permite la creación de esas formas cuadradas, un descubrimiento que Yang ve extrapolable a otros campos, según declara a Gizmodo: “Hasta ahora solo teníamos dos métodos para fabricar cubos: moldearlos o cortarlos. Este tercer método se podría aplicar al proceso de fabricación: hacer cubos con tejido blando en vez de moldearlo”.
Ahora que ya sabemos cómo los wombats ‘fabrican’ sus heces, quizás la ciencia pueda aprovechar el descubrimiento y la propia científica asegura que podría aplicarse a la medicina para tratar problemas gastrointestinales. Según Yang, con sus hallazgos se mejorará nuestra comprensión sobre cómo los tejidos blandos se mueven dentro del cuerpo y cómo se mueve el intestino, para encontrar remedios a los problemas que se generan.
Son como grandes peluches, adorables marsupiales que suelen medir un metro de largo, pero que destacan por sus patitas diminutas. Hasta ahora, estos animales australianos guardaban un secreto: la forma cúbica de sus deposiciones. Ahora, la ciencia ha descubierto cómo son capaces de hacer cacas con formas cuadradas y, aún más importante, por qué.