Esta raya tuvo un embarazo virginal. Ahora su fallecimiento ha suscitado la polémica

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El pasado mes de febrero de 2024, el Acuario y Laboratorio de Tiburones de Hendersonville (ASL, por sus siglas en inglés), Carolina del Norte, hizo un anuncio sorprendente a través de su perfil en la red social Facebook: “¡Nuestra raya Charlotte está embarazada! Lo hemos mantenido en secreto durante más de tres meses. ¡Pero lo realmente sorprendente es que no tenemos ninguna raya macho!”

Desde ese preciso instante, Charlotte se volvió viral. Especialmente, en TikTok, donde empezaron a publicarse cientos de vídeos de ella. Pero ¿cómo era posible? Algunos apuntaron a un raro caso de hibridación por el cual la raya hubiese sido fecundada por el esperma de un tiburón. Sin embargo, los biólogos marinos aseguraron que era muy improbable, ya que ambas especies están emparentadas de forma extremadamente lejana. Tampoco hay casos documentados de que haya sucedido alguna vez.

Los científicos responsables del ASL apostaron por la teoría de la partenogénesis para explicar el suceso. Este término, que procede del griego y que popularmente se conoce como “parto virginal”, implica que un embrión pueda desarrollarse sin fertilización del óvulo. No es un fenómeno habitual, pero se han documentado multitud de casos en aves, anfibios, reptiles, insectos y peces.

Aborto, muerte y polémica

Tres meses después de dar la noticia del embarazo virginal de Charlotte, el ASL anunció que la raya había desarrollado “una rara enfermedad reproductiva” que había desembocado en la interrupción de la gestación. Ahora, en otra publicación en Facebook, ha hecho público su fallecimiento: “Nos entristece anunciar que, tras someterse al tratamiento, Charlotte ha fallecido”.

Aunque el community manager del ASL agradeció las muestras de “amor y apoyo”, lo cierto es que las críticas no han tardado en aparecer. Principalmente, porque muchos dudan de que Charlotte llegase a estar embarazada y que, si lo estuvo, fue porque se la emparejó con un macho. De hecho, han llegado a tildar este supuesto caso de partenogénesis como de una “estrategia de marketing” para incrementar el número de visitas al acuario.

Brenda Ramer, propietaria del acuario, lo ha negado en una entrevista al medio WLOS: “Solo puedo decirles lo que sabemos con seguridad. Nunca he sido una mentirosa ni esto fue una estafa”. Puede que nunca sepamos la verdad con absoluta certeza, pero lo que está claro es que Charlotte se ha convertido en la raya más famosa de la historia.