El motivo inaudito por el que dio calabazas a su cita de 'First Dates': "Igual es cosa mía"

Nuria lo tenía muy claro. El chico que quería conocer en 'First Dates' no podía ser un adicto a la PlayStation y advertía, antes de verse las caras con Jonathan, que era una persona "muy intensa": "Me como la cabeza, exploto, recrimino, exijo, hasta que me salgo con la mía". Además, confesó ser "sincera" y odiar las mentiras. Una vez hechas las presentaciones, daba comienzo una cita en la que surgiría más de un roce y no precisamente de cariño.

El joven de 24 años, de Barcelona, explicó durante el primer plato que acude al gimnasio "cuatro días a la semana", una frecuencia descabellada en opinión de la comensal. "Me aburre soberanamente el gimnasio. Me he apuntado muchas veces y es pagar por pagar", desveló la concursante del 'dating show' de Cuatro. El opositor a policia intentaría hacerle cambiar de opinión: "¿Sabes qué pasa? Que yo no me lo tomo como un esfuerzo. Me sale levantarme temprano, entrenar... es mi día a día".

"Lo he notado como demasiado perfecto todo. No me termino de fiar"

Más tarde, Jonathan reconocería al equipo del espacio presentado por Carlos Sobera que no le había gustado la actitud de su compañera: "Lo ha dicho como con mucho pasotismo. Me ha tirado para atrás. Yo respeto, pero sí que es verdad que considero que tienes que tener una actividad para despertar algo en tu vida, no solo tener tu trabajo y tu casa". Finalmente, ella aceptó esta afición: "Mientras no me salga con dietas y eso, por mi vale. Que vaya a todo lo que quiera. La que no voy a ir soy yo".

Siguiente tema de conversación: los celos. "Siempre he dicho que mi pareja ideal tiene que ser mi amiga. Yo soy muy abierto en ese aspecto, no me considero celoso. No soy una persona 'imaginatoria'", afirmaba el catalán. "Mi problema es que soy muy desconfiada, es como que lo que me dices está muy bien, pero, ¿y si luego no es verdad?", preguntaba Nuria, que parecía estar más bien enumerando motivos para que al participante no le apeteciese tener una próxima cita.

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N. Costas

"Yo tengo un carácter malo, soy intensa tanto para lo bueno como para lo malo. Si veo algo que no me cuadra, se me cruza el cable", explicó la chica, que luego dejaría a su cita y a los espectadores de Mediaset España a cuadros con su firme creencia en los signos de horóscopo y su antipatía por los capricornio: "Tengo un problema con ellos. Son gente falsa, introvertida, que no se abre". "A la hora de conseguir una pareja, si ya juzgas por un simple signo... No sé, me ha parecido mal", opinó Jonathan, que, para tranquilidad de la joven, señaló que era libra.

Por si quedaba alguna duda, Nuria y Jonathan no tuvieron una segunda cita. El problema, al menos para la primera, la desconfianza de la que ya avisó minutos antes: "No tendría una segunda cita, porque, a lo mejor soy yo, pero lo he notado todo demasiado perfecto, bonito. Las cosas no son así. Igual es cosa mía, pero no me acabo de fiar".