Rocío Flores se moja sobre la desesperada llamada de Ortega Cano (con recadito incluido)

Ortega Cano ha dicho basta. El extorero, cansado de estar en el centro de la polémica por las declaraciones de su mujer, Ana María Aldón, y las consecuencias de las mismas en los diferentes platós de televisión, ha dado un golpe sobre la mesa en Telecinco: el diestro entró este lunes, 20 de junio, en 'Ya son las ocho' a través del teléfono de Gloria Camila para pedirle tanto a su hija como a su pareja que enterraran el hacha de guerra porque está "regular de salud y un día me va a dar un patatús".

La demanda de Ortega era clara, implorando a las dos grandes mujeres de su vida que le dejasen vivir en paz. Frente a esto, Gloria aseguraba estar poniendo todo de su parte, evitando entrar en cruces de declaraciones con la mujer de su padre y tratando de arreglar las cosas con ella mediante una conversación para la que ya ha dado el primer paso.

Esta llamada desesperada era recogida en 'El programa de AR', donde Rocío Flores participaba este martes, 21 de junio. A la joven no le dolían prendas a la hora de abordar esta cuestión, asegurando que entiende perfectamente que Cano haya explotado de esta manera: "Demasiado ha tardado en hacerlo", comenzó aseverando en su intervención sobre este respecto.

Tras esto, la hija de Rocío Carrasco no dudó en darle un pequeño tirón de orejas a su "tete", como ella asegura que le denomina en la intimidad: "Bajo mi opinión, esa llamada tenía que haberse producido en 'Viva la vida', que es donde trabaja su mujer, quien ha dado pasos al frente mediante exclusivas hablando de su familia".

De este modo, Flores afeaba al viudo de su abuela su rapapolvo en el programa de Gloria Camila, por quien daba la cara en el 'Club social': "En mi opinión, tendría que decirlo donde trabaja Ana María, porque Gloria siempre ha dicho que quería parar todo esto y hablar las cosas en casa, que es donde se tienen que solucionar estos temas".

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X.M.

Tras dejar claro que le parecía injusto que fuese su tía la que se ha comido este estallido del torero y no Ana María, Rocío optaba por dejar paso a sus compañeros, con Lequio asegurando que la petición de Ortega Cano no tiene demasiado sentido teniendo en cuenta que el trabajo tanto de Gloria como de Aldón versa en hablar de su familia: "Es quien menos puede quejarse del trabajo de su mujer. Porque si no, ¿de qué hablan estas dos en los platós?".

Sandra Aladro, por su parte, optaba por poner el foco en el asunto de fondo: la crisis matrimonial y familiar que experimenta el clan. Así, pese a que Joaquín Prat subrayaba que todo este conflicto lo ha generado Ana María con sus exclusivas hablando de su familia, la periodista optaba por enfatizar otra cuestión: "Sí, pero esta llamada evidencia que hay problemas. Ella no crea el problema, lo cuenta en televisión. Y ya de ahí surge todo esto, pero el problema en el matrimonio existe, es real".