Decisión fulminante en Mediaset: dos concursantes, expulsados de su 'reality show' por "traspasar líneas rojas"

Solo tres semanas después de su estreno, los responsables de Los vecinos de la casa de al lado se han visto obligados a expulsar de manera disciplinaria a dos de sus grandes protagonistas: la organización ha considerado que Mariona Ferré, quien llevaba en el formato desde su inicio, y Napoli han traspasado líneas rojas inaceptables, por lo que han sido eliminados de manera definitiva del concurso.

Cristina Boscá, presentadora del formato exclusivo de MiTele Plus, ha sido la encargada de comunicar la decisión oficial a los seguidores del reality show al inicio de su última gala: "Lo que parecía un juego inocente se les ha terminado yendo de las manos. Han incumplido las normas de convivencia y han tenido un comportamiento poco adecuado. Como hay líneas rojas que no vamos a permitir que se traspasen, ninguno de los dos forma parte ya de Los vecinos de la casa de al lado", aseveraba muy seria la comunicadora.

El programa mostraba entonces solo una parte de las imágenes de lo sucedido. En ellas podía verse como ambos participantes comenzaban bromeando con espuma de afeitar, echándosela uno encima del otro entre risas. Poco a poco el juego iba escalando, rompiéndose huevos en la cabeza, ensuciando las puertas, corriendo por el jardín... lo que hacía que el cabreo de Mariona fuese in crescendo hasta el punto de perder los papeles contra su compañero en un forcejeo con manotazos y patadas ante el que la organización se ha visto obligada a tomar medidas drásticas.

La presentadora daba paso acto seguido a un vídeo en el que se les daba la oportunidad a ambos de dar explicaciones sobre lo sucedido y, sobre todo, pedir disculpas por la imagen ofrecida. La primera en hablar era Ferré: "Napoli empezó a chincharme un poco, empezamos a jugar y el juego se nos fue de las manos. Lo que pasó no me representa, porque soy una persona que no pierde normalmente los papeles en ningún momento. Hay bromas que yo no las tolero tanto como otros compañeros y se me fue un poco la cabeza", reconocía a cámara la joven, muy apenada.

"Si pudiera hablar con Napoli le diría que lo siento mucho, que tanto a él como a mí se nos fue un poco de las manos el juego. Me siento un poco triste porque yo quería continuar en el concurso. Lo mejor que me llevo de mi paso por aquí es salir de mi zona de confort, mostrar cómo soy yo, mi personalidad, que es diferente a la de muchos otros, vivir nuevas experiencias y conocer gente muy guay", concluía afirmando Mariona.

Napoli, por su parte, tampoco se sentía orgulloso de lo sucedido la noche anterior con su compañera: "Le quiero pedir perdón y espero que ella haga lo mismo conmigo, y le daré un abrazo. En el reality vivir 24 horas no es fácil, en el momento en que uno perdió el control ya no había marcha atrás. Me da rabia estar fuera del reality show porque podía dar mucho juego, llegar al final y, quién sabe, quizá ganarlo. Me habría gustado mostrar quién soy de verdad", remataba apenado el mítico tentador de La isla de las tentaciones.