El nutricionista de 'Más vale tarde', Pablo Ojeda, revela 5 trucos saludables para comer rebozados si estás a dieta

El nutricionista Pablo Ojeda acudió ayer a Más vale tarde para enseñar a realizar unos rebozados saludables. El experto en nutrición es consciente de que este tipo de freidurías son muy habituales en cualquier casa, por lo que aportó una serie de trucos para cocinar estos productos de una forma más sana. En primer lugar, Ojeda destacó que es fundamental utilizar aceites y rebozados de calidad.

En este sentido, el nutricionista se alejó de la harina o el pan rallado, ya que apostó por otros rebozados más saludables. En primer lugar, Pablo Ojeda optó por cocinar unos gambones rebozados con tempura y con panco. Este último rebozado es un pan japonés que queda muy crujiente y que no absorbe demasiado aceite.

En cuanto al aceite, Ojeda señaló que el aceite de oliva es mucho más saludable que el de girasol. Aunque Pablo Ojeda cocinó estos gambones en una sartén con mucho aceite, recordó que cocinar rebozados en el horno o en la freidora de aire es un truco perfecto para no ingerir menos calorías: "Así vamos a ahorrar aceite y es mucho más sano", señaló el experto en nutrición.

Pablo Ojeda también quiso cocinar pescaito frito de una forma saludable. Para ello, marinó los boquerones y los mezcló con harina de garbanzo. Esta harina es más sana a la de trigo, puesto que tiene mucha proteína y un buen aporte de fibra. Ojeda afirmó que la harina de garbanzo aporta mucho sabor, pero no queda tan crujiente como el panco o la tempura. Ante estas opciones saludables, Cristina Pardo se quedó atónita: "Solo como fritos en la sección de nutricionista, en la sección de salud", bromeó la presentadora.

Tras esto, Ojeda se animó a hacer un flamenquín con pollo, queso y jamón serrano. Para hacer este rebozado más saludable, el nutricionista utilizó harina integral, huevo y copos de maíz. Y es que la harina integral es una buena opción, puesto que contiene fibra, la cual aporta mucha saciedad. Eso sí, Pablo Ojeda reconoció que prefiere el pan rallado a la harina normal, ya que "a nivel metabólico, no es lo mejor del mundo".

Además, Ojeda dio un buen truco para que los fritos tengan menos calorías: freír trozos grandes. Y es que, cuanto más corto sea el trozo, más aceite absorberá. "Lo que estamos tratando es dar una alternativa más saludable a los rebozados tradicionales", ha terminado subrayando el nutricionista.