Carlos Latre, sobre Motos y Broncano: "No lo veo como una competición, pero en España nos empeñamos siempre en el enfrentamiento"

Carlos Latre vuelve a estar de moda. El humorista y comunicador, que lleva 25 años trabajando en la pequeña pantalla, vive, o más bien, está por vivir, una nueva era dorada en televisión tras el boom de Crónicas Marcianas. Ligado todavía a Atresmedia Televisión hasta el final de la temporada actual de Tu cara me suena, salta a Movistar Plus+ con un programa especial antes de su gran reto en Mediaset España.

El 23 de julio llega a la plataforma de pago Carlos Latre. Inimitable, un show grabado hace algunas semanas en el Teatro Nuevo Alcalá de Madrid en el que repasa su dilatada trayectoria con la participación de invitados de excepción y amigos como Xavier Sardá, Antonio Banderas, Estopa, Santiago Segura, Boris Izaguirre o Camela. Y con motivo de su lanzamiento, desde El Confidencial hemos tenido la ocasión de charlar con él en exclusiva.

Tras hablar sobre este proyecto tan especial, producido bajo su propia productora, Ertal Entertainment, hemos intentado conocer los primeros detalles de su apuesta para el access prime time de Telecinco a partir de septiembre. Nuevo programa con el que competirá directamente con Pablo Motos y El hormiguero de Antena 3 y la llegada de David Broncano a La 1 de Televisión Española.

En primer lugar, Carlos, ¿cómo estás?

Muy contento con este Carlos Latre. Inimitable, porque es la confluencia de todo lo que he aprendido durante estos 25 años. Me lo propuso Movistar y es una idea maravillosa porque tenemos mucho contenido. Daba para dos o tres especiales, pero nos dijeron que fuera un gran show en una entrega y eso es lo que hemos hecho. Rememoramos todos mis programas, hay humor, cariño, verdad, emoción... Me encuentro con muchos profesionales, ángeles que me han ayudado durante esta carrera, grandes amigos, estrellas... es algo muy emocionante.

Es muy bonito juntarse para celebrar. Hay que juntarse más, celebrar más, abrazar más. Estamos en un momento un poco de irascibilidad y está todo el mundo muy enfadado. Y yo pido lo contrario y que no perdamos nuestra esencia. España es un país de humor. De risa, de bar, de meme, de chiste...

Lo haces también desarrollando tu faceta de empresario bajo tu propia empresa...

Desde que era bastante joven y empezaba en esto entendí que yo era una marca. Siempre hemos trabajado desde el marketing, la estrategia... hemos intentado crear no solo empresas, también grupos de trabajo y equipos que sean muy pro. Es un empeño crear un ecosistema empresarial en torno al entretenimiento. Hacer industria. En España se ha tendido poco a profesionalizarlo y llevarlo más hacia el 'cuñadismo'. Es bonito ver que tu sueño no solo es un sueño y que ya es una realidad.

Y ahora afrontas un gran reto desde Telecinco, ¿por qué crees que se ha producido la llamada de Mediaset para competir contra Pablo Motos y David Broncano?

Hay muchos factores. Son 25 años de carrera, una experiencia, he pasado por todo tipo de formatos, estoy en un momento de madurez espectacular, tengo el cariño del público, soy una persona bastante aceptada a nivel social... es un proyecto que llega en un gran momento. Estoy muy agradecido.

"Si le gusta a la gente lo que voy a hacer en Telecinco, maravilloso, si no, a otra cosa, no pasa nada. Esto es tan solo tele"

¿Cómo va a ser el programa?

Hasta el 20 de julio soy Atresmedia al 200% y hasta que no acabe Tu cara me suena casi no hablo de lo que va a venir, que va a ser muy apasionante. Va a haber mucha verdad. Voy a aplicar todo lo que he aprendido este tiempo con mucha tranquilidad y humor. Me encanta que nadie sepa lo que vamos a hacer.

Pero, ¿ya lo tienes todo pensado?

Sí, ya está todo. Está todo pagado [risas]. Está todo pensado.

¿Se va a parecer a Latrevisión, el programa que protagonizaste justamente en Telecinco hace años?

Va a ser completamente diferente, pero no puedo decir nada. Es curioso porque de este espacio siempre comentan que no tuvo mucho éxito haciendo un 31% de audiencia. Imagínate el poco éxito que tuvo. Hizo 5 millones y medio de espectadores de media. Fue lo que hoy en día sería un pelotazo.

¿Cómo llevas el hecho de que vas a competir con dos gigantes del entretenimiento?

Lo primero, es que no lo veo como una competición, pero en España nos empeñamos siempre en el enfrentamiento. He estado trabajando con Pablo muy bien y lo ha entendido perfectamente, tratándome con un cariño espectacular. Y Broncano me parece un tipo sensacional con el que me llevo espectacularmente bien. Por lo tanto, lo afronto con tranquilidad y creo que hay espacio para todos. Si le gusta a la gente, maravilloso, si no, a otra cosa, no pasa nada. Esto es tan solo tele.

Uno de mis maestros, Joan Ramón Mainat decía, 'en el CIS, en lo que les preocupa a la población, entre los diez primeros no sale nunca la televisión'.

"Pablo Motos fue el primero al que se lo dije. Por supuesto. Me dijo 'qué lástima que te perdemos con el cariño que te tenemos"

¿Te costó decírselo a Pablo Motos?

Qué va, fue el primero al que se lo dije. Por supuesto. Me dijo 'qué lástima que te perdemos con el cariño que te tenemos'. Y Tinet Rubira (productor ejecutivo de Tu cara me suena) y todo Atresmedia han estado al tanto de todo. Hay mucho cariño y una puerta abierta siempre. La gran suerte que he tenido en esta profesión es que he estado en todas las cadenas y en todas tengo la puerta abierta. He trabajado siempre con gente maravillosa. Me voy con todo el cariño y la comprensión de que es un reto.

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X.M.

Tampoco estarás en Tu cara me suena...

Y eso es lo que más pena me da. Es el programa de mi vida. Pero no pasa nada, además, nunca se sabe...

¿Y con Broncano has hablado?

No, no somos tan amigos, pero tenemos una muy buena relación y hablamos de vez en cuando. Además, está bajo el paraguas de El Terrat donde tengo grandes amigos, grandes maestros... Andreu Buenafuente es un gran referente para mí.

¿Eres de esos profesionales que está muy pendiente de la audiencia?

No me preocupa demasiado. Esto es una carrera de fondo y lo más importante es el cariño del público. Todo lo que hago es pensando en ellos. La audiencia es un referente, pero lo más importante es hacerlo bien y estar contento.

Carlos, hay una oleada de rostros populares que dicen que los límites del humor están más marcados que nunca y que se es menos libre, ¿tú qué piensas?

Que es absolutamente cierto. El otro día hicimos en remember de Crónicas marcianas y el comentario más repetido era 'cuánta libertad', 'qué programa más libre'. Hoy sería inviable hacerlo. Tenemos muchas más libertades, hemos conseguido muchas cosas, pero hay más autocensura que nunca. Vivimos en la época de los filtros. Todo es educado, bienqueda, lo que toda decir y nada de lo que pienso realmente. Y es muy triste.

Todo lo que digas va a ser utilizado en tu contra, por lo cual, es terrible que no puedas compartir tu forma de pensar. Además, es muy muy terrible que haya gente de unos partidos y de otros, de un tipo de ideología y de otra, que se erijan como los buenos o los malos y viceversa. Estamos en una democracia plena, muy moderna, somos el mejor país del mundo en cuanto a libertades, pero en el tema del humor tenemos la piel demasiado fina.

"Usted diga lo que quiera que yo podré ofenderme o bloquearle, pero siga diciendo lo que quiera"

¿Por qué crees que sucede esto?

Hemos perdido la buena fe. Antes hacías un chiste y nadie pensaba que ibas contra ningún colectivo o persona, solo era humor. Ahora, tienes que tener cuidado con lo que dices por si lía parda.

Hay que poder hacer humor de todo. No se puede encarcelar a un tipo porque haga un mal chiste. Todos podemos hacer un mal chiste o dar una mala opinión. ¿Qué hay más censurable que el hecho de que metan en la cárcel a un tipo por hacer un chiste? ¿De verdad el humor es tan importante? Qué mal estamos.

Por suerte o por desgracia tenemos un mando o un botón con el que puedes bloquear a un tío en redes porque lo que ha dicho te ha ofendido. Tienes derecho a ofenderte, a tus creencias, a ejercer tu libertad, pero ¿dónde acaba mi libertad? Donde empieza la del otro. Por lo tanto, que el humor sea censurable, me parece peligroso. No es sano. Usted diga lo que quiera que yo podré ofenderme o bloquearle, pero siga diciendo lo que quiera.