Belén Esteban explota en 'Ni que fuéramos (Sálvame)': "Que no me enfoque la cámara"

Anabel Pantoja parece seguir sin querer hablar. Desafortunadamente para ella, cuanto más largo el silencio, más descabelladas son las conjeturas. El equipo de Ni que fuéramos (Sálvame) no para de conseguir más y más pruebas que acabarían de confirmar la presunta infidelidad por parte de su pareja, David Rodríguez. Sin embargo, Belén Esteban constituye el único apoyo de la sevillana, aunque, aparentemente, está empezando a resultarle demasiado duro.

El programa ha representado este lunes, 22 de julio, la pintoresca situación del primer encuentro entre David Rodríguez y su presunta amante. Muñecos en mano, Kiko Hernández y María Patiño han leído la que habría sido su primera conversación desde el inicio de su relación con Anabel, la cual tuvo lugar una noche de fiesta. "Quiero quitarme el calentón contigo", ha verbalizado el colaborador leyendo el mensaje del fisioterapeuta.

Belén desenmascara a la presunta amante de David Rodríguez: "Llaman a Amor Romeira"

"Ahora mismo cogería el coche e iría a por ti", ha seguido leyendo Hernández. Finalmente, los periodistas han terminado representando todo un encuentro que habría llegado a ocurrir un par de horas después, ya que Rodríguez habría acudido al domicilio de la joven para recogerla con su vehículo y dirigirse, juntos, a un discreto pantano cercano. Durante la descripción del relato, Belén Esteban, en completo silencio, no ha parado de negar con la cabeza.

Esta actitud ha molestado especialmente a María Patiño, que ha salido en defensa de su equipo: "Un éxito periodístico es algo que consigue alguien, nuestro compañero Javier de Hoyos. Jamás me atrevería a pedir las fuentes, pero los que nos sentamos delante de la pantalla no debemos cuestionar el trabajo de los compañeros. A mí me toca los pies", ha demandado la presentadora.

"Yo no digo que esté mintiendo Javier de Hoyos, no te equivoques", ha respondido Esteban. "Esas caras de 'no, no, no' me revientan, porque entonces tienes dos opciones: callarte o hablar", le ha vuelto a instigar Patiño. Fatigada, Belén ha optado por callar. Con los ojos vidriosos, al borde del llanto y con la cámara en un inevitable primer plano hacia la colaboradora, Belén ha hecho un tedioso ejercicio de contención.

Finalmente, no ha podido evitar callarse: "Que no me enfoque la cámara porque voy a procurar que no se me caiga una lágrima, así que la cámara llevadla para otra parte". De nuevo, ha optado por el silencio con arma para proteger a su amiga: "No voy a hablar. Como sabéis todo, hablad vosotros". Aunque ha jurado no decir nada, finalmente ha acabado por dar su opinión.

"Lo único que digo es que a esta chica no le echo la culpa. Aquí hay un culpable, lo he dicho desde que me he sentado. Esta chica dice que la traicionó un amigo, pero es mentira. La chica y el amigo llaman a Amor Romeira", ha desvelado Belén en un total arrebato. De este modo, la defensa de la colaboradora se ha centrado en su amiga, sin proteger a su actual pareja ni a su presunta amante.