"Me estoy asustando": una invitada de 'La Sexta Xplica' no da crédito con los argumentos en plató

En el tema del alquiler, hay guerra abierta entre empresarios y arrendadores contra jóvenes con contratos precarios. Esta rivalidad se ha representado a la perfección este sábado, 27 de julio, en La Sexta Xplica. Las declaraciones de los primeros han dejado atónita a Romana Flores, una de las invitadas que enfrenta una desoladora situación: "Voy a tener que dejar mi piso".

El precio del alquiler, especialmente en Madrid, es insostenible. El programa de La Sexta ha recogido el testimonio de múltiples jóvenes que atraviesan dificultades para poder residir en una vivienda digna. Se enfrentan a precios desorbitados, pisos de dimensiones ínfimas, condiciones indignas y caseros usureros, entre otras muchas problemáticas. Romana Flores, una de las invitadas, ha compartido lo que para ella son, de primera mano, las nefastas consecuencias de la especulación con la vivienda, un bien esencial.

Sotillo, contra el centralismo: "El barrio de Salamanca siempre ha costado millones"

"Yo ahora vivo sola y me voy a tener que ir de ese piso porque yo sola no voy a poder pagar", ha relatado dando a entender que ha enfrentado recientemente una ruptura amorosa. "Con lo que estoy escuchando de todos, me estoy asustando", ha confesado atemorizada. "El futuro está super negro. Si yo quiero estar viviendo en Madrid, no puedo, pero en Málaga tampoco. En ningún lado", ha relatado.

De acuerdo con ella, toda la grada de jóvenes trabajadores ha expresado su indignación. De hecho, incluso la presentadora ha manifestado su conformidad con sus argumentos: "Nos está planteando Romana una inquietud muy natural, muy lógica. Esto pinta muy negro". Así, ha dado paso al sociólogo Alberto Sotillos, que ha argumentado en contra de la labor política.

"Qué pinta negro es seguro. Queremos que nos cuenten las cosas y las escuchamos de los políticos sin ponerlas en duda. Cuando se habla de regulación sin construcción pública es una forma de estafarnos a los ciudadanos. Otra cosa es que nos encante poner regulaciones y atacar los pisos turísticos. Y otra cosa es que vivir en el centro de la ciudad no es un derecho, la vivienda puede serlo, pero vivir en el centro no", ha analizado.

Esto ha revolucionado el plató, que ha saltado en su contra. Sin embargo, el sociólogo ha vuelto a incidir sobre sus argumentos iniciales: "Ya en la Edad Media la gente quería vivir dentro de las murallas. No lo conseguía y se iba fuera y ahora nuestros padres y abuelos no se iban al centro de la ciudad. El barrio de Salamanca ha costado millones siempre. No es un derecho vivir en el centro de las ciudades. Hay que pedir vivienda pública".