Fortalezas y debilidades de 'El Cid' en su segunda temporada, por su asesor histórico

"A quien le gusten los choques de espadas, las armaduras, los caballos y demás, va a disfrutar". Palabra de David Porrinas, probablemente el mayor experto sobre la figura del Cid, que además ha participado en la segunda temporada de la serie de Amazon Prime Video como asesor histórico. Evidentemente, sabe de buena mano de lo que adolecían los primeros cinco episodios, y estos otros tantos, que desde este 15 de julio están disponibles en la plataforma, vienen a suplir esas carencias: "Esta temporada tiene más ritmo y es más bélica", apunta el historiador.

Y es que los primeros capítulos de 'El Cid' fueron, para muchos, un tanto aburridos para la imagen de héroe de acción que siempre se ha tenido del personaje. Ya lo dijimos aquí en su momento, esta serie tiene más historia que ficción, y por lo tanto no podíamos esperar un 'Juego de Tronos'. Aun así, la primera temporada terminó con una batalla muy potente (la de Graus) y con una muerte, la del Rey Fernando I de León, que dividió sus territorios entre sus hijos, el prometedor punto de partida de estos nuevos capítulos.

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Al mayor, Sancho, le correspondía el Reino de Castilla, a Alfonso el de León, a García el de Galicia, a Urraca la ciudad de Zamora y a Elvira la de Toro. Un juego de tronos en toda regla que hace que el argumento de esta segunda temporada se desate, como apunta David Porrinas: "Sancho no está de acuerdo con el reparto testamentario de su padre y desata una guerra entre hermanos y reinos. Distintas batallas en las que Rodrigo Díaz de Vivar tiene un papel fundamental y donde va a aprender lo que es la política, la guerra, la ambición, la codicia y la miseria de la guerra".

Una segunda temporada con más acción

David Porrinas es medievalista especializado en cuestiones relacionadas con la guerra y la caballería en la Edad Media y hace un par de años publicó 'El Cid. Historia y mito de un señor de la guerra' (Desperta Ferro Ediciones). Vamos, que de acción medieval sabe un rato, y, como nos desvela, en esta temporada "no solo se van a ver dos batallas, sino también un asalto a una fortaleza con las máquinas típicas de la época. Se van a ver muchas cuestiones típicas de la guerra medieval. Guerras entre cristianos, entre distintos reinos cristianos, donde hay muerte, miseria, sudor, sangre, mierda…".

En definitiva, todo lo que muchos echaron (echamos) de menos en la primera temporada de 'El Cid', aunque para Porrinas, "era necesariamente una presentación de un mundo complejo, de los personajes, de las relaciones que mantienen entre sí. Había que presentar ese Al-Ándalus dividido en taifas, con especial protagonismo de la de Zaragoza. Esta temporada centra el foco en los reinos cristianos de León, de Galicia, de Castilla y en las disputas y luchas que mantienen entre sí".

"No va a haber ninguna pelotera con las espadas ni con otros detalles"

Pero claro, a más batallas, más complejidad en el ámbito de producción. Y si bien la primera temporada no adolecía de calidad de ambientación, es evidente que doblar (por lo menos) la cantidad de escenas de acción e introducir nuevos escenarios es un riesgo. Un riesgo que según el historiador se salva con "una mejora en cuanto a producción. Las dos batallas están bastante bien planteadas para lo que conocemos sobre el periodo".

Evidentemente, no todo va a ser acción, "hay episodios de transición", dice Porrinas, "ya que hay que explicar las relaciones complejas entre reinos y hermanos, pero hay mucha más dosis bélica". Lo que no va a haber, según el medievalista, es "ninguna pelotera con las espadas y otros detalles". Y es que hay que recordar que la primera temporada de 'El Cid' tuvo algunas críticas por ciertos detalles escenográficos. Detalles de los que ha tomado nota la producción: "Se nota que han tenido en cuenta las opiniones de la gente y han intentado mejorar en ese sentido", explica Porrinas.

Jaime Lorente y un Cid más maduro

Otra de las críticas a los primeros episodios de 'El Cid' fue la elección de Jaime Lorente para interpretar a Ruy Díaz. Evidentemente no es Charlton Heston, pero tampoco esta serie tiene nada que ver con el 'Cantar de Mio Cid'. Es más, hasta los últimos capítulos de la primera temporada no escuchamos aquello de "campeador" (apelativo con el que se reconocía al que sobresalía en el campo de batalla). Y es que, como indica David Porrinas, incluso en esta segunda temporada, "siguen siendo años iniciales y ciertamente desconocidos en la vida del personaje".

"Se ve una evolución y un crecimiento, una maduración del personaje que ya abandona una época juvenil y empieza a entrar en una edad adulta. Las circunstancias que le toca vivir le van a curtir todavía más", explica el historiador sobre el Ruy Díaz que vamos a ver en estos cinco episodios. Episodios que beben de las fuentes históricas, pero en los que "necesariamente se han llenado los huecos que ha dejado la historia con ficción, y esta tiene mucha lógica", apunta Porrinas.

"A partir de la siguiente temporada, si la hubiera, sí que se van a empezar a meter en terrenos más conocidos de la vida del personaje", explica el medievalista, que dice que "en esta temporada sí que le puede sonar más a la gente lo de Zamora. La defensa de la ciudad por parte de Urraca, enfrentándose a su hermano Sancho".

Y es que hay quien se sorprendió con el ‘poco’ protagonismo del Cid en la primera temporada, donde se dividía los minutos de pantalla con otros personajes muy importantes como el rey Fernando, Sancho o Urraca. "Esta temporada no es tan coral como la primera, aunque es verdad que Urraca y Ruy tienen más protagonismo que otros personajes. Aquí cobran más protagonismo el rey Alfonso y el rey García. También aparecen otros elementos como la compleja nobleza gallega, que es un vector de desorden", desvela Porrinas.

Y sobre la interpretación de Lorente, el historiador explica que el actor "ha madurado con el personaje. Hay que recordar que el Ruy de la primera temporada es un adolescente y en esta temporada se ve como va entrando en la edad adulta, siendo una persona más segura de sí misma, más conocedora del mundo en el que vive, que sigue recibiendo baños de realidad. Y el actor crece de la mano del personaje". Es evidente que, para David Porrinas, la elección de Jaime Lorente es "un acierto", y señala que "se han cebado de una manera muy irracional con él, por sus otros papeles, por su juventud…".

"Quien toca el Cid se expone a críticas feroces. Parece que es un ser intocable"

"Yo entiendo que quien toca el Cid, y lo he sufrido, está expuesto a críticas feroces, porque parece que el Cid es un ser intocable sobre el que ya está todo dicho, y resulta que el Cid se lleva reinterpretando toda la vida desde que murió", explica Porrinas. "Cada siglo ha tenido una reinterpretación del personaje, y esta es la del siglo XXI. Y bueno es que sigan apareciendo estas reinterpretaciones, porque eso quiere decir que el personaje sigue vivo y que sigue suscitando interés".

Veremos si esta segunda temporada de 'El Cid', en Amazon Prime Video, suscita interés. Elementos hay para ello. Y si bien estos nuevos cinco episodios han llegado con menos ruido que los primeros, prometen más ritmo y más acción. En definitiva, un producto más accesible a todo tipo de públicos, incluso a los que no les interesa el personaje. El histórico, no el legendario, al que si llegamos a ver en algún momento será en la tercera temporada de la serie, si la hubiere.