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Las 10 mejores sintonías de cabecera de la historia de las series de televisión
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Las 10 mejores sintonías de cabecera de la historia de las series de televisión

Desde el ‘I’ll be there for you’ de ‘Friends’ hasta el popular rap de ‘El príncipe de Bel-Air’, los créditos de cabecera con música memorable son ya parte del legado cultural de las series de televisión

Foto: Michael C. Hall en una imagen de los títulos de crédito iniciales de la serie 'Dexter'. (Showtime)
Michael C. Hall en una imagen de los títulos de crédito iniciales de la serie 'Dexter'. (Showtime)

Forman parte de la identidad de un espectáculo, pero también de la cultura popular cuando se convierten en series de referencias. Los títulos de créditos y sus melodías se han convertido en parte del ADN de los aficionados a las series por sus ritmos contagiosos y ese efecto videoclip, es decir, la imposibilidad de separar mentalmente sonido e imagen.

Sus canciones nos remiten directamente a los episodios que hemos visto una o más veces: un lugar conocido y reconfortante donde las historias parecen ser más grandes que la vida. La amistad entre el grupo de amigos de Friends no sería la misma sin aquel I’ll be there for you, de The Rembrandts, ni la música de Larry David (Curb your enthusiasm), compuesta por Luciano Michelini, hubiese dado lugar a tantos memes si no apuntase con sus notas alegres a situaciones cómicas y surrealistas.

Foto: Diego Luna en la piel del personaje Cassian Andor (The Walt Disney Company)

El listado puede ser largo, pero a continuación elegimos 10 sintonías que han marcado a generaciones de espectadores y que quedarán en la memoria por mucho que pase el tiempo.

1. Friends

Más que una canción, se trata de una promesa de fidelidad eterna. La misma con la que los espectadores han vuelto una y otra vez a la serie de amigos que supuso un antes y un después en las sitcoms a partir de los 90. The Rembrandts firmaban esta melodía, e invitaron a los protagonistas de Friends a que apareciesen en su videoclip.

2. Twin Peaks

La calma melancólica de las notas de Angelo Badalamenti, eterno colaborador de David Lynch, supusieron el punto de partida de una historia que parecía un simple thriller policíaco, pero que iba mucho más allá en su narración y género. La melodramática obertura no es más que parte del complot entre Lynch y Mark Frost para sorprenderte con lo que vendrá después.

3. Los Simpson

Tan mítica es su sintonía orquestada como lo son las imágenes de los personajes de esta alocada (pero curiosamente funcional) familia animada en la que cada miembro corre a casa para encender la tele... y verse a sí mismos. Danny Elfman establecía la banda sonora al primer chiste meta-referencial de la serie, que emula lo que cada espectador haría por ver un capítulo más de ella.

4. Juego de Tronos

El encargado de la banda sonora de la serie, Ramin Djawadi, fue también el compositor de esta memorable melodía, que se va volviendo cada vez más épica, y que remite a temibles batallas y traiciones entre sagas familiares. La serie La casa del dragón vuelve a utilizarla para su propia presentación.

5. Bojack Horseman

El batería de The Black Keys, Patrick Carney, compuso una melodía de percusión y sintetizadores para ilustrar el auge y caída de este caballo-humano, vieja estrella televisiva de los 90, siempre tan incorrecto pero también con buen corazón. Su melodía remite a un estado de viaje psicotrópico por las frustraciones de la dura industria televisiva.

6. El príncipe de Bel-Air

"Al oeste de Filadelfia crecía y bebía sin hacer mucho caso a la policía...". La versión en español del rap cantado por Will Smith al inicio de cada episodio forma parte de toda una generación noventera que creció viendo sus seis temporadas. La canción fue compuesta por Quincy Jones III y relataba los orígenes del personaje de Will y su viaje en un taxi (que olía a cuadra) hasta la casa de sus tíos en Bel-Air.

7. Malcolm

La ineludible Malcolm y su canción rockera Boss of me, del grupo They Might Be Giants, se estrenó en el año 2000, pero sus imágenes de cabecera remitían sin dudas a un estilo de vida adolescente en los 90: series de animación en un televisor de tubo catódico, lucha libre y películas de serie B. El mundo en el que vivía el joven Malcolm (Frankie Muniz) estaba bien dibujado desde el comienzo.

8. Larry David (Curb your enthusiasm)

El pianista y compositor Luciano Michelini compuso una alegre sintonía que transmite, o al menos así condiciona la serie, todavía en emisión desde el año 2000, la simpatía por la vida y por reírse de uno mismo. Larry David hace el resto, interpretándose a sí mismo y mostrando los grandes fracasos de su vida como actor.

9. The Office

El músico estadounidense Jay Ferguson, quien también trabajó la música de obras audiovisuales como Terminator o la serie NCIS: Los Ángeles, compuso esta inolvidable sintonía para la versión estadounidense de la serie original británica. Los fans le deben a Ferguson el cariz cómico que supo aportar a unos títulos de crédito que recogía el ambiente relajado de una oficina cualquiera en un pueblo cualquiera.

10. Dexter

La conocida cabecera de Dexter fue titulada Morning routine, encargada por Showtime al compositor Daniel Licht, e ilustraba a la perfección las pulsiones de este meticuloso asesino en serie. La percusión y la cuerda se alían con los sonidos de la hoja de afeitar, la carne en la sartén o el hilo dental, para remitir a un estado de patente alerta por tu vida.

Resulta complicado dejar de lado otras sintonías memorables que merecen su mención aparte, bien por lo innovador de su propuesta, o bien por su calidad técnica musical, como es el caso de The wire, The leftovers o American horror story, cuya composición ha ido variando temporada tras temporada, o las canciones con letra icónica de Los Soprano (Woke up this morning, de Alabama 3), Community (At least it was here, de The 88), Narcos (Tuyo, de Rodrigo Amarante) o The big bang theory (The history of everything, de Barenaked Ladies), entre muchas otras.

Forman parte de la identidad de un espectáculo, pero también de la cultura popular cuando se convierten en series de referencias. Los títulos de créditos y sus melodías se han convertido en parte del ADN de los aficionados a las series por sus ritmos contagiosos y ese efecto videoclip, es decir, la imposibilidad de separar mentalmente sonido e imagen.

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