Pasional primer beso de Martina y Curro en 'La Promesa': así ha sido el encuentro

Hace ya más de un mes que la baronesa de Grazalema llegó al palacio de La Promesa, la serie de las sobremesas de entre semana de La 1 de Televisión Española, y la mujer ya siente la necesidad de marcharse de allí. Aunque Elisa le ha hecho un gran jaque mate a la reina del palacio, la marquesa Cruz, la mujer está cansada de vivir allí y soportar las miradas de la gente.

Así se lo ha transmitido a Lorenzo durante los últimos episodios de la ficción de época, pero el capitán le ha pedido que sea paciente, pues ya queda muy poco para que por fin puedan darle la estacada a Alonso y quedarse con sus tierras y el dinero del difunto barón de Linaja. En el capítulo de este miércoles, Lorenzo se ha cruzado con Catalina, y ha querido conocer hasta qué punto la chica podría ser un obstáculo en sus planes.

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A. Richart

Lorenzo le ha preguntado a la hija de Alonso cuáles son sus funciones y sus nuevos métodos sobre las tierras de la finca. El hombre le ha dado la enhorabuena, a su irónica manera, y ha querido saber más sobre sus proyectos. Catalina le ha cortado sus pesquisas, pues la chica no se ha fiado en absoluto del extraño interés del militar.

Curro contra Elisa

Elisa, por su parte, ha hablado con Curro, a quien ha encontrado mustio en el salón. Curro está resentido con ella por haberle forzado a su tía a que se marchase, y Elisa le ha recordado que fue Cruz quien quiso estrangularla. A Curro no se le ha ablandado el corazón, pues piensa que cualquier institución de reposo puede llegar a ser peor que una cárcel, y le ha dicho a la baronesa que a partir de ahora no pensaba ser cordial con ella.

Elisa se ha quejado por teléfono de lo insoportable que está siendo su estancia

La baronesa se ha quejado por teléfono de lo insoportable que está siendo su estancia en La Promesa, y las ganas de rodearse de gente que le quiera de verdad. Lorenzo le ha escuchado, y se ha sentido ofendido por formar parte de "esta experiencia insoportable". Elisa le ha dicho a Lorenzo que su hijo le culpa por lo de Cruz, y ha seguido achuchando al militar para irse de allí.

Lorenzo le ha contado a Elisa que ahora La Promesa está en manos de Catalina, y eso lo cambia todo. El militar le ha pedido a su amante que se gane la confianza de la chica para conocer cuáles son sus planes en la finca, y así poder echarlos a perder para que Alonso no consiga pagar la deuda de su préstamo.

El esperado beso

Curro ha querido hablar con Lorenzo para contarle su enfrentamiento con Elisa. El chico le ha querido contar su versión de los hechos y dejarle bien claro a su padre que no le cae en gracia la baronesa. "Bajo mi punto de vista no le debes nada a Cruz, ni a ninguno de los Luján", le ha comentado el militar con respecto al cariño que le tiene a sus tíos. El joven ha comentado que ha dejado de lado sus indagaciones sobre sus orígenes y que ha asumido que sus padres son aquellos que lo criaron, por lo que los Luján son parte de su familia.

Elisa le ha contado a las señoritas que quedan en palacio sus incomodidades durante su estancia, así como su mal momento con Curro. Martina le ha contado posteriormente a Curro lo que Elisa les ha comentado. Los dos jóvenes han tenido un momento muy íntimo en la sala de billar, mientras jugaban, y la chica le ha comentado cuáles eran los problemas entre su padre y Alonso.

Curro no ha querido entristecer a Martina, pues le ha adulado diciéndole que le encanta su sonrisa. Bajo el efecto de la luz tenue, Curro y Martina han compartido su primer beso. ¿Se forjará una larga relación entre la prima de los Luján y el hijo de Lorenzo?