Esta ha sido la reacción de Pía ante su peor noticia en 'La Promesa': ¿dónde está su bebé?

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Han pasado ya demasiados días desde que el bebé del personaje de Pía, en la serie de La 1 de Televisión Española La Promesa, desapareciese. Desde entonces, nadie en el área de servicio ha sido capaz de confesárselo ni a la malherida madre, que todavía se recupera, semiinconsciente, de su doloroso parto, ni a nadie de la zona noble, debido a la reciente llegada de don Antonio de Carvajal y Cifuentes. En el episodio de este miércoles, que se ha emitido a las 16:30 horas, alguien ha afirmado saber algo sobre el paradero del infante.

Si recordamos, en el episodio anterior, la dulce Catalina preguntó dónde se encontraba el bebé, pues tenía ganas de volver a abrazarlo. Jana y Rómulo inventaron una excusa, que el niño dormía, para ocultar la verdad. Fue entonces cuando Jana le reprochó a su jefe que no les hubiesen comunicado aún a los marqueses la fuerte noticia.

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En el episodio de hoy, Manuel le ha preguntado a Jana cómo proseguía la salud de Pía, y de paso, también se ha interesado por el recién nacido. La criada ha intentado eludir la respuesta, pero el señor ha insistido: "Jana, el niño se encuentra bien, ¿verdad?". La sirvienta ha fingido que el bebé no podría estar mejor atendido, de mano en mano.

Pía, casi recuperada

Teresa, por su parte, ha anunciado a Lope, Salvador y Feliciano que Pía se encontraba mucho mejor. La feliz noticia guardaba un lado oscuro, pues debían pensar cómo contarle al ama de llaves la desaparición del bebé. Abel le ha comentado la mejoría de Pía a Jana, y de paso le ha preguntado por el estado de Ramona, a quien hacía tiempo que no visitaba.

Pía se ha despertado, aturdida, y ha preguntado cuánto tiempo llevaba así. "Algunos días, no le voy a engañar", ha reconocido Jana. El ama de llaves ha dicho que guardaba confusos recuerdos de lo sucedido. "Me habéis hablado mucho de mi hijo", ha empezado a sospechar la recién despertada, "Pero yo no recuerdo haberlo visto. ¿Dónde está?".

Abel ha intentado distraer a Pía, diciéndole que más tarde le traían al bebé

Abel ha intentado disipar la atención de la paciente, diciéndole que más tarde se lo traían, pero la mujer ha insistido a Jana que quería ver a su hijo. "Tenga un poquito de paciencia, señora Adarre, se lo ruego", le ha soltado el médico, con lo que Pía ha tenido que conformarse con el misterioso silencio de sus acompañantes.

El ama de llaves lo ha intentado también con María Fernández, Teresa y Simona, a quienes les ha preguntado por su hijo. Simona, con una sonrisa nerviosa, le ha dicho que en ese momento estaba Candela dándole de comer, pero que en cuanto el médico lo permitiese, se lo traerían sin falta. Pía se ha quedado visiblemente preocupada. ¿Hasta cuándo podrían aguantar el secreto?

Revelado el paradero del bebé

Teresa ha acudido al encuentro de Feliciano, y le ha notado distante. El chico ha admitido que sigue preocupado por lo que la criada dijo, sobre qué sucedería si el hijo de Adarre no aparecía nunca. Teresa le ha contado que intentaron disimular durante su última visita a la habitación, y Feliciano ha destapado la intriga: "¿Puedo contarte algo?", ha avisado el lacayo, "Prométeme que no vas a juzgar ni hacer preguntas".

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Mientras tanto, en la habitación de Pía, la paciente ha cogido de la mano a Jana, y le ha aprovechado que estaban a solas para hacerle una encerrona: "Quiero que me digas la verdad", ha comenzado la mujer, "Ahora siento que todos me mienten. Tú también". Pía le ha pedido a Jana que le contase si su hijo no salió adelante, pues tenía la obligación de contárselo.

Sin otro remedio, Jana ha suspirado y se ha sentado junto a la cama de Pía. "Su hijo nació fuerte y sin taras", ha comenzado a relatar la criada. "Lo que ocurre es que alguien se lo ha llevado, Pía, pero no sabemos ni quién ni a dónde". Al escuchar esto, Pía ha entrado en una crisis nerviosa, llena de lágrimas.

A los pocos minutos, Teresa ha acudido al encuentro del señor Baeza y el resto de sus compañeros, anunciando que creía saber dónde estaba el bebé de Pía. "Lo tienen en el convento de Villerquino", ha soltado Teresa. ¿Qué le ha llegado a decir Feliciano y cómo ha podido llegar el niño hasta un convento?