Tristes palabras entre Mauro y Teresa en 'La Promesa': "Estoy enamorada de otra persona"

• Helena Ezquerro, de estudiar Lenguas a trabajar en Salón de té La Moderna: así es Matilde en la vida real
• Reparto de La Promesa: conoce a todos los personajes de la serie de TVE

Son malos tiempos para la familia Arcos de la serie La Promesa, que La 1 de Televisión Española ha comenzado a emitir a partir de las 17:30 horas. Desde que Pía le contase a Cruz en el anterior episodio que estaba decidida a llevar a los culpables del rapto de su bebé a la Guardia Civil, Petra quiso sacrificar su puesto de trabajo frente a la idea de la marquesa de despedir a su hermano Feliciano.

Aparentemente, esta decisión no le ha dolido tanto a Petra como a Cruz, que ha visto que debía desprenderse necesariamente de la única persona en la que confiaba entre las paredes del palacio. La marquesa le ha dado un par de días a la doncella para que termine de organizar su marcha de allí, y le ha asegurado que no se iría con una mano delante y otra detrás, pues pensaba entregarle una suma de dinero y referencias para trabajar en otra casa. Petra, por su parte, le ha perjurado a la marquesa que sus labios estaban sellados sobre todo lo que sabía de ella.

TE PUEDE INTERESAR

El gran sacrificio que Petra va a hacer por Feliciano en 'La Promesa': ¿será este su final?

A. Richart

La señora Arcos ha trasladado la noticia a Pía y a Rómulo, quienes no podían terminar de creer lo que escuchaban. Rómulo ha querido saber las razones por las que Cruz despedía a su doncella, y aunque al comienzo la mujer se ha negado a contarlas, Pía le ha insistido y se ha declarado única culpable del robo de Dieguito.

Pía se ha negado a que la mujer se fuese de rositas, pues pensaba que la Guardia Civil debía intervenir y llevarla a la cárcel. Tampoco ha creído que Feliciano estuviese exento de culpa en el caso. "Contenga su veneno", le ha indicado Petra a Pía, al decirle que ella había sido la única ganadora de todo aquello: su hijo estaba de regreso y ella permanecía en La Promesa. La única condición que ha impuesto la doncella es que no la tomasen con Feliciano en su ausencia.

Felicidad por la noticia

"Entonces la harpía ha confesado", ha exclamado sorprendida Candela, gustosa de ver cómo Petra recibía su castigo después de todo, cuando Pía ha informado de las novedades al servicio. María, Lope y Candela han asegurado que sería un alivio perder de vista a la mujer, pero Pía les ha pedido que guardasen la compostura, pues un despido era, al fin y al cabo, un fracaso para todos.

Teresa, a Mauro: "Hay una razón de peso para no besarte"

Feliciano tampoco podía creerse la noticia que su hermana le daba en privado. El muchacho ha querido hablar con la marquesa para hacerle entender que aquello era un error, pero Petra se lo ha prohibido. "Esta decisión es lo mejor que nos puede pasar a los dos", ha asegurado Petra, quien hace poco revelaba en la más profunda intimidad al bebé de Pía que Feliciano, en realidad, era su hijo.

Dura conversación de Teresa y Mauro

A Mauro tampoco le cabía duda alguna de que Feliciano estaba metido en el ajo del robo del bebé, y en el episodio de hoy se ha mostrado feliz por haber besado a Teresa y que ella le correspondiese. Sin embargo, en un nuevo encuentro con ella, la chica le ha parado los pies. "Las cosas entre nosotros no pueden ir más allá", ha expresado Teresa, quien ha concedido que se dejó llevar en aquel momento, igual que lo hizo Mauro. "Siempre nos hemos llevado bien y hacíamos buena pareja", ha reconocido el mayordomo.

"También es cierto que la señorita Leonor se cruzó en tu camino", le ha recordado Teresa. Aunque la chica ha aclarado que todo aquello ya estaba más que superado, le ha dicho a su exnovio que no podrían volver a ser quienes fueron. "Hay una razón de peso para no besarte", ha declarado la chica. Esa razón empieza por F, y Mauro la ha adivinado en seguida.

"Lo siento, pero estoy enamorada de otra persona", ha declarado Teresa. Mauro le ha preguntado si pensaba que Feliciano merecía su amor, a lo que la criada ha contestado que él tampoco lo merecía, y aun así se lo dio. Con estas tristes palabras, Mauro y Teresa se han alejado más entre ellos, en un momento en el que parecía que su relación podría reactivarse. ¿Olvidará Teresa a Feliciano o se enamorará más de él cuando sepa que no fue idea suya el rapto de Dieguito?