Serias dudas sobre la salud mental de Jimena en 'La Promesa': ¿la historia se repite?

• Un nuevo heredero podría hacerle la competencia a Manuel en La Promesa: ¿de quién se trata?
• Reparto de La Promesa: conoce a todos los personajes de la serie de TVE

La hija de los duques de Infantes en la serie La Promesa, no está pasando por el mejor momento. Jimena se enteró durante el pasado episodio de la ficción de época de La 1 de Televisión Española que su marido Manuel se había vuelto a marchar del palacio sin avisar. Es la segunda vez que el chico se aleja de su esposa para poder aclarar su mente y tranquilizarse de sus continuas discusiones maritales. La chica que se ha quedado en tierra, sin embargo, se ha mostrado más inestable que nunca en el episodio de este jueves.

Martina ha encontrado a Jimena en su nueva habitación, pensando en el viaje perfecto a Italia, que serviría a Manuel y a ella para reforzar su relación. La hija de Margarita le ha cuestionado si estaba segura de aquella decisión, dada la situación actual, pero Jimena pensaba que se refería a los conflictos que amenazaban a Europa en esos momentos.

TE PUEDE INTERESAR

Bronca inédita: las presiones de Mercedes podrían provocar la despedida de Jimena en 'La Promesa'

A. Richart

"Qué contento se va a poner en cuanto sepa que lo he organizado todo", ha expresado la casada, alegando que si iba a estallar una guerra, era mejor no posponer el viaje más. Eso de alegrarse no sonaba mucho a una reacción que a Manuel le saliese natural, así que Martina ha aconsejado a la ilusionada chica que le consultase a su marido cuando volviese. "Necesitamos estar a solas, lejos de un lugar tan agobiante", ha explicado Jimena.

Catalina llega a una conclusión

En privado, Martina le ha contado a Catalina la extraña conversación que había mantenido con Jimena. La hija de Alonso ha pensado que la idea del viaje no tenía ningún sentido, y más como estaban las cosas fuera de las fronteras. Además, la chica ha recordado que la idea de la luna de miel ya pasó por la mente de Jimena hacía tiempo, y que acordaron postergarlo.

Catalina: "Es el momento de afrontar que ha perdido el contacto con la realidad"

Catalina ha llegado a una conclusión: "es el momento de afrontar que Jimena ha perdido el contacto con la realidad". Al mismo tiempo, la administradora de la finca se ha preguntado si su cuñada podría estar fingiendo para llamar la atención.

Jimena, al borde del colapso mental

Más tarde, Cruz ha encontrado a Jimena en la sala de música, desquiciada, rompiendo papeles de partituras. "Me traen malos recuerdos. No quiero que nadie las toque", ha exclamado la chica, en un total brote de locura. La marquesa ha intentado pararla, preguntándole si de verdad creía que aquel era el mayor de sus problemas.

Pero, por supuesto, las piezas musicales no eran más que un reflejo de su estado anímico: Jimena le ha dicho a su suegra que estaba enfadada con ella por haberle prometido a su madre que se encargaría personalmente de que la normalidad regresase al joven matrimonio. "Y no veo esa normalidad por ninguna parte, de hecho no veo a Manuel por ninguna parte", ha acusado la joven.

Cruz ha alegado que no podía inmiscuirse en sus asuntos matrimoniales de aquel modo, y que debía confiar en que aquel bache pasaría. Jimena, que no atendía a razones, le ha amenazado con que salvase su matrimonio, o se encargaría de que su apellido fuese "arrastrado por el lodo": "Hará que Manuel vuelva a comer de mi mano", ha augurado Jimena.

¿Directa al sanatorio?

Cruz le ha contado a Martina lo que le acababa de suceder, y la prima de los Luján se ha sorprendido ante la nueva actitud de Jimena, pues le ha contado que solo hacía unas horas estaba ilusionada con el supuesto viaje a Italia. "Era la viva imagen de la felicidad", ha descrito Martina.

La chica también le ha contado a su tía que Catalina pensaba que todo aquello lo hacía Jimena para llamar la atención, pero Cruz ha pensado que, en la sala de música, estaba sola y no parecía esperar a nadie. "Tenemos que andarnos con mucho ojo con ella", ha concluido la marquesa, espantada por las imprevisibles acciones que Jimena podría acometer.

Jimena está bordeando los límites de la salud mental. Conociendo el historial de las mujeres en el palacio de La Promesa, a las que a la mínima señal se les ha llevado a una casa de descanso, como Cruz durante una buena temporada, o al sanatorio como Eugenia, la madre adoptiva de Curro, ¿le tocará esta vez a Jimena ingresar en un centro de rehabilitación?