La vida de Teresa podría cambiar en 'La Promesa': así ha sido la pedida de mano de Feliciano

• Comienza la caza de Cruz en La Promesa: así será su plan maestro para matar a Curro
• Reparto de La Promesa: conoce a todos los personajes de la serie de TVE

El joven Feliciano lleva unos días mentalizándose del gran paso que está dispuesto a dar en la serie de La 1 de Televisión Española, La Promesa. El lacayo, que llegó sin ningún tipo de experiencia y sin más apoyo que el de su hermana Petra (que después resultó ser su madre), ha mantenido una sólida relación sentimental con Teresa. En el episodio de este lunes, emitido a las 17:30 horas, el muchacho ha clavado la rodilla en el suelo, dispuesto a darlo todo por su amada.

En el capítulo anterior, Feliciano le pidió a don Rómulo que le ayudase a elaborar una petición de mano digna de una persona resabiada, y desde entonces, mayordomo y lacayo se han andado con cuchicheos que no han pasado desapercibidos para Teresa.

TE PUEDE INTERESAR

El lado más personal de Alicia Bercán, de 'La Promesa': de sus inicios como modelo a su novio influencer

Laura G. Vara

No es la única noticia sorprendente que ha sucedido en el episodio de hoy. Salvador ha acudido al encuentro de Manuel, buscando al doctor Bueno, para comunicarle que su padre, don Eusebio, había llegado a La Promesa. El aviador se ha extrañado ante la presencia del señor, pues en todo el tiempo que conocía a Abel, nunca había tenido la oportunidad de encontrarse con su padre.

Algo esconde Abel

Parece que Abel y su supuesto progenitor guardan grandes secretos. Manuel tenía entendido que el hombre se dedicaba a la importación y exportación de productos, y para sacarle tema de conversación mientras llegaba el doctor, el hijo de los Luján le ha preguntado qué tal le iba en su empresa.

Eusebio no parecía sentirse demasiado cómodo ante la pregunta, y ha intentado quitársela de encima diciendo que sus negocios iban estupendamente. En ese momento, ha llegado Abel, quien se ha quedado a cuadros al encontrar la inesperada presencia de su padre en los pasillos de La Promesa.

Eusebio le ha recriminado que tenía "responsabilidades" y no podía ignorarlas

El doctor se ha llevado Eusebio a la planta de servicio para hablar con más privacidad. El hijo le ha reprochado que le dejase en evidencia con su llegada, y el hombre le ha contado que tenían problemas en casa y necesitaban su ayuda. Abel ha contestado que no podía irse, pues en el palacio tenía un trabajo, y Eusebio le ha recriminado que tenía "responsabilidades" y no podía ignorarlas. Jana ha entrado en ese momento en la habitación y se ha encontrado a los dos discutiendo. ¿A qué se refería Eusebio? ¿Tendrá Abel, acaso, una familia paralela, de la que está huyendo?

Feliciano se lanza

Más tarde, Rómulo ha preguntado a Feliciano sobre la supuesta pedida de mano, pero el lacayo ha contestado que todavía no había sucedido. "En el último momento, no he sido capaz", ha declarado un nervioso Feliciano. Rómulo ha intentado sacarle el valor al chico, diciéndole que no le tenía por un cobarde, pero el novio de Teresa ha admitido estar muerto de miedo.

A sus espaldas, Teresa ha escuchado la conversación sin entender nada, lo que ha propiciado que la consecuente pedida de mano de Feliciano se desarrollase de manera precipitada. "No he tenido valor de darte una cosa que compramos juntos", ha contado Feliciano, en relación con sus fechorías con Rómulo.

Teresa ha caído en la cuenta de a lo que se refería Feliciano, y le ha preguntado si estaba hablando de lo que ella creía. Feliciano ha sacado una cajita con una alianza de su bolsillo, y ha sorprendido a la sirvienta agachándose y pidiéndole casarse con ella. ¿Aceptará Teresa? ¿Será otra pedida en vano, como la que don Pelayo le hizo a Catalina?