Avance del capítulo 365 de 'La Promesa' del martes, 28 de mayo

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Todo está revolucionado en el palacio de La Promesa, especialmente desde que, en el transcurso de la semana pasada de la serie de La 1 de Televisión Española, la narración diese un giro de 180 grados con un salto temporal. Ahora, la ficción de época que se emite entre semana a las 17:30 horas, mantiene a unos marqueses muy alejados entre sí, como alejado está Lope de Vera en estos momentos. En el nuevo episodio de este martes, 28 de mayo, los espectadores sabrán si Santos finalmente ha recibido su merecido por parte del cocinero.

En el capítulo anterior, emitido este lunes, del melodrama protagonizado por Ana Garcés, Arturo García Sancho y Eva Martín, la relación de los marqueses cada vez ha ido a peor, y ambos han buscado apoyo en María Antonia, que ha tenido un desencuentro con Petra. Catalina le ha asegurado a Rómulo que no se iría del hangar hasta que Cruz resolviese lo que hizo, y este le ha pedido ayuda a Tadeo para hacerle recapacitar.

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Margarita se ha mostrado encantada con la perla que le regaló el conde de Ayala, quien ha tenido que hacer frente a la furia de Martina y, sobre todo, a la de Petra, pues es la misma perla que le regaló en su momento al ama de llaves.

A causa de la vuelta de Gregorio, Beni se va a llevar a Dieguito a Badajoz y Jana se ha trasladado a la habitación de Pía, que está hundida. Rómulo ha llamado la atención a Santos por presumir ante Lope, pero este no le ha obedecido, y ha provocado un fuerte enfrentamiento con el cocinero.

Avance del capítulo 365

La tensión es máxima entre Lope y Santos, que están a punto de llegar a las manos. Solo la aparición de Vera evita un mal mayor. Este conflicto destapa la verdad: la relación de Vera y Santos no es lo que parece.

Margarita trata de mediar entre Martina y Ayala, consiguiendo aparentemente más de lo que había logrado hasta ahora. Todos siguen preocupados por Pía y la aparición de Gregorio, pero contarán con un aliado inesperado.

Llegan a oídos de Alonso las intenciones de Cruz y Lorenzo con Catalina, y el marqués toma cartas en el asunto. Lorenzo, encargado del negocio de las mermeladas, dará nuevas directrices sobre el nuevo camino a seguir.