El sorprendente diagnóstico de Ayala en 'La Promesa' levanta todas las teorías y reacciones

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El personaje del conde de Ayala podría haber visto su vida terminada en la serie La Promesa. De pronto, lo que parecía un mero respiratorio, podría ser algo todavía mucho peor para el pretendiente de Margarita. En el capítulo de este lunes de la producción de época de La 1 de Televisión Española, el último diagnóstico del doctor ha dejado consternados tanto a los habitantes del palacete andaluz como a los espectadores.

En episodios anteriores, Margarita le pidió a Martina que fuese más suave con Ayala, especialmente desde que sufriese aquel extraño episodio de ahogamiento. Hoy, la marquesa se ha interesado educadamente por el estado de salud del que fuera su amigo. La madre de Martina ha dicho que el conde estaba más recuperado, pero quería escuchar los resultados de los análisis del médico cuanto antes.

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A. Richart

Alonso ha asistido en ese momento al desayuno, cuando Rómulo ha llegado a la mesa con una carta desde Francia. "Es de Manuel", ha dicho agitado el marqués, quien ha abierto el sobre mientras Jana miraba de reojo, al mismo tiempo que le servía el zumo. Alonso ha anunciado que tanto Manuel como Curro lo habían pasado mal, pero que están sanos y salvos. A Cruz se le han saltado las lágrimas de la alegría.

Jana le ha contado la noticia a Martina, y Alonso ha ido detrás a confirmarlo y a abrazar a su sobrina. El marqués se ha visto optimista, pero también había acudido a la chica para hablar de don Ignacio. La prima de los Luján ha dejado constancia de que ella no quería hacer daño a nadie, pero el patriarca ha dicho que su actitud abría viejas heridas del pasado, sobre la muerte de Fernando. Martina ha dicho que no terminaba de fiarse de Ayala, pero su tío le ha pedido que hiciese por cambiar las cosas.

El revivir de Cruz

En la planta del servicio, Jana le ha contado a María Fernández sobre la carta que habían recibido los marqueses. Lo que la sirvienta no sabía era que su amiga tenía otra carta de Manuel, únicamente dirigida a ella. En la misiva, el aviador le contaba a Jana que esperaba volver vivo, y que la vida les deparase un futuro mejor. Entre lágrimas, Jana ha leído que si el chico no volvía, quería que fuese feliz por los dos. La sirvienta ha mirado al techo, y ha pedido a Dios que hiciera que Manuel volviese pronto.

La carta también ha abierto una nueva oportunidad para los marqueses, quienes después de un largo alejamiento, se han visto con ganas de celebrar la noticia de que Manuel estuviese vivo. Cruz ha reconocido que se dormía todas las noches llorando, y que su marido había pagado los platos rotos. Alonso, por su parte, ha deseado haberle podido consolar mejor, y ha admitido que no sabía si podría soportar la pérdida de otro hijo. ¿Superará el matrimonio sus baches?

Por lo pronto, Cruz no ha tardado en confiarle a María Antonia lo bien que había ido la conversación con su marido. Ahora solo le quedaba saber qué le sucedía a su amiga. María Antonia no ha querido contarle que el marqués le había echado de su palacio, pero ha dejado caer que quizás su presencia ya estaba de más. "En algún momento tendré hacerlo", ha comentado la mujer, sobre marcharse tarde o temprano. Cruz le ha pedido, en cambio, que se quedase.

El diagnóstico de Ayala

A la mañana siguiente, el doctor Gamarra ha regresado al palacio, y ha esperado a que Ayala asistiera al salón para hacer públicas sus conclusiones. "Está fuera de peligro", ha comentado el doctor, pero había algo que le preocupaba de su caso. "Su desvanecimiento fue producido por una causa bien distinta", ha comenzado a explicar, "alguien le ha envenenado".

Todos en el salón se han mirado las caras, y así ha comenzado el gran Cluedo de La Promesa. ¿Habrá sido Petra, como venganza a su idilio con Margarita? ¿O habrá sido Cruz, quien ya intentó envenenar a la baronesa de Grazalema? ¿Cabría pensar que el conde hubiese digerido por su propia cuenta el veneno, para culpar a la hija de Margarita? Lo que es seguro es que, a partir de ahora, la gran enemiga de Ignacio, Martina, estará en el centro de todas las miradas.