Begoña se ha hartado de ser la "mujer florero" de 'Sueños de libertad', pero podría pasarle factura

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Parecía que el personaje de Begoña no podría superar el terror que le provocaba el trauma sobre lo sucedido en el pasado, cuando Luz y Andrés le ayudaron a sobrevivir a la herida de bala en la cabaña. Pero en el capítulo de este viernes de Sueños de libertad, que Antena 3 emite entre semana a las 15:45 horas, la enfermera protagonista podría por fin cambiar los malos recuerdos por otros mejores.

En el episodio anterior de la ficción de época protagonizada por Natalia Sánchez, Alain Hernández y Dani Tatay, entre otros intérpretes, Begoña dejó caer a Andrés, deliberadamente o no, un señuelo donde podrían tener un futuro encuentro. Hoy, sus planes han progresado adecuadamente. El capítulo ha comenzado cuando Marta, Andrés y María han reprochado a Jesús que se hubiese llevado todo el protagonismo del reportaje de España Hoy. Hasta Begoña ha salido mal parada, cuando el periodista ha pasado por completo de su profesión como enfermera. "Me ponen de mujer florero, Jesús", se ha quejado la esposa. El empresario ha admitido que tampoco le gustaba eso, aunque en realidad se deleitaba de ser la estrella.

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En el dispensario, después de la noche en la que Luz le ha tenido que suministrar morfina a Jaime, el doctor Berenguer ha pensado que Borrell no querría una relación en la que ejercer de médico las veinticuatro horas, y ha intentado cortar con ella: "Quiero liberarte de lo que está por venir". Luz ha contestado que era ella quien debía tomar la decisión de acompañar al doctor hasta el final, y él le ha preguntado si de verdad quería estar atada a un hombre que iba a morir.

Cuando Marta ha visitado a Luis en el laboratorio, le ha proporcionado los buenos datos de venta, y aprovechando su optimismo, ha comentado que la vida le iba cada vez mejor. Luis ha tanteado cómo marchaba su matrimonio con Jaime, después de saber que Luz y él estaban coqueteando, y Marta ha comentado que estaban "mejor que nunca", lo que no ha dejado de extrañar al primo.

Jaime, a Luz: "Quiero liberarte de lo que está por venir"

Luz, por su parte, ha sugerido a Jaime que se cogiese unos días libres, pues le veía arisco hasta con sus pacientes. El hombre ha admitido que necesitaba dejar de pensar en su problema, y la médico le ha pedido entrar en su cabeza, ya que él no podía abandonarla. "Quiero estar contigo ahora", le ha dicho ella, antes de besarle.

Luis protege a Marta

Jaime se ha pasado por el laboratorio, y Luis le ha avisado de que veía a Marta bastante contenta. "Sé la vida que estás llevando", le ha explicado al doctor, pidiéndole que no le hiciese daño a su prima. Berenguer ha asegurado que Marta no iba a sufrir, y le ha pedido que confiase en él. Luis no ha entendido nada, en absoluto. "No tenéis que ser discretas, tenéis que ser invisibles", ha alertado Isidro, por su parte, a Fina, cuando esta le ha explicado que había vuelto con su misteriosa amante.

Mario ha llamado después a Luis para hablar con él. El joven ha pensado que no conocía muy bien a su padre, después de todo, pero el que fuera su amante le ha indicado que le inculcó su pasión por los perfumes. Luis ha querido saber cómo se conocieron, y el topógrafo ha relatado que Gervasio le ayudó a cambiar una rueda del coche y después le invitó a almorzar.

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Su padre quiso reprimir sus sentimientos durante mucho tiempo, y nunca se planteó abandonar a sus hijos. "Adoraba a tu madre y os adoraba a vosotros", ha concedido el hombre, aunque Luis ha supuesto que, en realidad, Gervasio estaba enamorado de él. Después de su última carta, el hombre se enteró de lo que había llegado a hacer, "y me sumí en el infierno", ha confesado Garcés.

Ramona tiene un plan

En la habitación de las dependientas, Ramona ha preguntado a Claudia quién era el padre de su futuro hijo. La madre se ha quedado a cuadros al enterarse de que era Tasio, un hombre casado, y se ha puesto muy nerviosa al saber que planeaba ponerle el apellido de él y criarlo sola. La recién llegada ha exigido conocer a ese Tasio.

Ramona ha acudido a la capilla a confesarse, y le ha contado a Mateo que Claudia estaba embarazada. La mujer se ha quedado incrédula con que el sacerdote ya supiese todo aquello. La madre de Claudia ha sufrido por dejar sola a su hija, y Mateo le ha asegurado que saldría adelante, porque era una buena mujer. Ramona ha pensado que había fracasado como madre, y ha asegurado que ella misma encontraría una solución.

Ramona le ha reprochado a Tasio que fuese a dejar tirada en la cuneta a su hija

De regreso a la habitación, Ramona ha conocido a Tasio, y le ha reprochado que fuese a dejar tirada en la cuneta a su hija y su futuro nieto. Aunque el mozo ha intentado convencerla de que él haría por cuidar de los suyos, Ramona ha insistido a Claudia con que se volvía con ella al pueblo, pues tenía un plan. ¿Qué pretende hacer la madre?

Enamorados, y sin resistencias

En el dispensario, Begoña le ha explicado a Luz el tonto reportaje que se había publicado en la revista, y la chica se ha quejado de ser un cero a la izquierda al lado de Jesús. Luz le ha preguntado cómo podía aguantar todo por lo que le hacía pasar su marido, y la enfermera ha asimilado que ya no tenía fuerzas para luchar, como si hubiese perdido su valentía. Para empoderarse, Begoña ha pensado en regresar a la cabaña y enfrentarse a sus miedos, pero la preocupada Luz ha llamado a Andrés, para que siguiese a su amiga.

Allí, la presencia de Andrés ha asustado a Begoña, justo cuando le volvía a dar un ataque de pánico. Ella ha comentado que sentía que aquellas pesadillas no iban a acabar jamás, y él le ha consolado con un abrazo, repitiéndole lo que le prometió en aquella misma cabaña: que nunca la dejaría sola.

Begoña ha contestado que ella ya estaba muerta en vida, y que no sabía cómo escapar de su jaula de oro. Andrés ha admitido que él tampoco era feliz, pero que ahora solo existían él y ella, "un hombre y una mujer, enamorados, que no pueden resistir la tentación". Begoña se ha lanzado a los labios del ingeniero, y han comenzado a desvestirse, en un arranque de pasión sin frenos. ¿Cómo podrá enfocar Begoña su vida a partir de ahora? ¿Qué pasaría si se quedase embarazada de Andrés?