Cinco tesoros bajo tierra: las cuevas más impresionantes y desconocidas de España

No hace falta ser un experto espeleólogo para poder disfrutar de las maravillas que ofrece una cueva o una gruta. En España contamos con una amplia gama y variedad de estos ecosistemas subterráneos que nos ofrece la naturaleza. De hecho, tenemos con una de las mejores redes de cuevas turísticas de Europa que se caracterizan por su espectacularidad y las increíbles formas de sus estalagmitas y estalactitas.

Quizás las más conocidas en nuestro país sean las Cuevas de Altamira (Cantabria) y que se caracterizan por sus imponentes pinturas rupestres, o las Cuevas del Drach (Mallorca). Sin embargo, hay otras más desconocidas y que son auténticos tesoros naturales y que merecen una visita ya que, seguro, te sorprenderán.

Cinco cuevas poco conocidas

La Cueva del Viento (Tenerife) es una de ellas. Para llegar hasta ella hay que desplazarse hasta Icod de los Vinos, recorrer un campo de lava y ascender al antiguo camino real. La gruta cuenta con el tubo volcánico con mayor longitud de la Unión Europea y el sexto más largo de todo el mundo. Se disfruta gracias a visitas guiadas para lo que hay que sacar una entrada online por un precio de 20 euros para adultos. Al acabar, el camino de vuelta discurre por ruinas de antiguas construcciones campestres, lo que aporta gran interés etnográfico.

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Fran Sánchez Becerril

La conocida como Cueva del Tesoro o del Higuerón está en el Rincón de la Victoria (Málaga) es la única cueva marina que se localiza en Europa. Dispone de visita audioguiada y el precio de la entrada, para los adultos es de 4,65 euros.

En la provincia de Alicante están las Cuevas del Canelobre en Busot que atesoran un amplio espacio de grutas kársticas en donde sobresale una sala de más de 80.000 metros cuadrados después de cruzar un túnel de 45 metros de longitud que te conducirá hasta ella. Destaca el conjunto de Sagrada Familia y la estalagmita El Canelobre. La entrada cuesta 8 euros y permite la visita al Museo de Música Étnica.

Siguiendo por el Mediterráneo, otra de las joyas subterráneas más bellas del país son las Cuevas de Sant Josep (Castellón). Se ubica junto al Parque Natural de la Sierra Espadán y su interior se navega en barca por el río subterráneo que fluye por allí, a través de un recorrido de 800 metros de longitud. Sobresalen sus pinturas rupestres, la Sala de los Murciélagos, el lago Azul y la galería de los Sifones.

España cuenta con una de las mejores redes de cuevas turísticas de Europa

Por último, en el interior de la meseta castellana, en pleno valle del Tiétar y sobre el Cerro de Romperropas están las Cuevas del Águila (Ávila). Se caracterizan por el gran valor geológico de sus formaciones y una bóveda central de unos 10.000 metros cuadrados. La entrada cuesta 10 euros y se va acompañado por un guía durante todo el recorrido.