Ni El Nogalón ni Las Tenerías: el paraíso desconocido del Valle del Jerte donde poder darte un baño en una piscina natural

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Ubicado en el corazón del Valle del Jerte, en la provincia de Cáceres, se encuentra un enclave natural que está ganando notoriedad entre los amantes de la naturaleza y el turismo de aventura. Este destino, aún relativamente desconocido para muchos, se revela como un auténtico paraíso durante los meses de verano, atrayendo a quienes buscan un refugio natural para disfrutar de sus vacaciones.

Este lugar mágico, conocido como Los Pilones, está compuesto por trece piscinas naturales formadas a lo largo del tiempo por la erosión del río Jerte sobre la roca granítica. Las también llamadas 'Marmitas de Gigante' se encuentran dentro de la Reserva Natural Garganta de los Infiernos, ofreciendo un paisaje de singular belleza. Las piscinas se conectan entre sí, pero mantienen su independencia, asegurando un flujo constante de agua cristalina.

Acceder a Los Pilones es una aventura en sí misma. Dos senderos principales conducen a este tesoro natural: uno que parte del pueblo de Jerte, con una longitud de aproximadamente 3,5 km, y otro de 3 km que comienza en la entrada principal de la reserva, situada en la carretera N-110, entre Cabezuela del Valle y Jerte. Ambos caminos son fáciles de recorrer y están inmersos en un entorno de castaños, helechos y cerezos, que ofrecen un paisaje cambiante y encantador en cualquier época del año.

La caminata hacia Los Pilones transcurre por un sendero bien señalizado con líneas verdes y blancas. A lo largo del camino, los visitantes pueden disfrutar de la exuberante vegetación y la frescura del entorno natural. Al final del recorrido, un puente de madera y unas pequeñas escaleras de roca conducen a las impresionantes piscinas naturales. Estas ofrecen no solo un lugar perfecto para bañarse en sus aguas frescas, sino también para tomar el sol en las lisas rocas graníticas o descansar a la sombra de los árboles cercanos.

Aparcamiento y servicios

Para preservar este entorno natural y garantizar una experiencia agradable para todos los visitantes, las autoridades han implementado ciertas regulaciones. Está prohibido aparcar en áreas específicas, como entre el campo de fútbol de Jerte y el camping Valle del Jerte, con posibles sanciones para quienes no cumplan con esta norma. Además, el aparcamiento junto a la rotonda de la N-110 es de pago. Aunque se permite la circulación libre por la pista de acceso a la reserva, no se puede aparcar en las zonas indicadas.

La manera más conveniente de llegar es estacionar en el Centro de Interpretación de la Reserva Natural. Desde allí, comienza la Ruta de los Pilones, una de las más emblemáticas del Jerte, que lleva a los visitantes a través de un paisaje impresionante hasta las piscinas naturales.

Un Refugio refrescante 'pet friendly'

Es fundamental tener en cuenta que Los Pilones no disponen de socorristas ni servicios de chiringuito. Se admiten perros, pero deben ir atados en todo momento. El acceso en coche está restringido a aquellos con autorización.

Los Pilones del Valle del Jerte son una joya natural que ofrece un refugio refrescante en los calurosos días de verano. Este destino, con su belleza y tranquilidad, se convierte en una parada obligada para quienes buscan conectarse con la naturaleza y disfrutar de un entorno único en la provincia de Cáceres.