El sobreprecio de vivir en un piso con piscina, alquileres hasta un 25% más caros
Muchos de quienes se plantean comprar o alquilar una vivienda prestan en verano especial atención a si el inmueble o la urbanización en la que se ubica dispone de una piscina
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La llegada del verano y las continuas olas de calor en la capital provocan que muchos de quienes se plantean comprar o alquilar una vivienda presten especial atención a si el inmueble o la urbanización en la que se ubica dispone de una piscina, ya que, como publicaba recientemente El Confidencial, el número de piscinas municipales en la capital es insuficiente para una población que no para de crecer.
Según se explicaba en ese reportaje, seis de los 21 distritos que componen Madrid no cuentan con una piscina pública mientras que, en otros tres, alguna de sus piscinas se encuentra cerrada este verano (en Vallecas, Fuencarral y en Moncloa-Aravaca), de tal manera que, de los 22 recintos acuáticos municipales que existen en la ciudad, ahora mismo solo están disponibles 19 para 3,2 millones de habitantes.
El alquiler se puede encarecer hasta un 25% y la compra, hasta un 49%
Una cifra a todas luces insuficiente que lleva a muchos ciudadanos a buscar pisos, ya sea en propiedad o en alquiler, con piscina, un plus que suele implicar alquileres y precios de venta, en algunos casos, mucho más elevados.
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Así, por ejemplo, la piscina puede incrementar el alquiler de una vivienda hasta en un 25% en el distrito de Chamberí y su precio de compra hasta en un 49% en Villaverde, según datos del departamento de Valuation & Advisory Services y Residencial de CBRE tras analizar el precio de las viviendas de entre 70 y 110 metros cuadrados en alquiler y compra, para comprobar si aumenta en el supuesto de tener piscina en comparación con las que no lo tienen. Según su estudio y, con base en los datos del Catastro, en Madrid capital habría actualmente 13.623 piscinas privadas frente a las 22 piscinas públicas de la capital.
En el caso del alquiler, según datos de CBRE, los precios medios más elevados se localizan en Chamberí. En este distrito, uno de los más caros también para comprar casa, alquilar una vivienda con piscina supone un desembolso medio mensual de 1.867 euros, mientras que, si prescindimos de ella, estaríamos hablando de 1.396 euros mensuales, es decir, un 25% menos o 470 euros menos cada mes, lo que al año se traduce en una diferencia de algo más de 5.600 euros.
La brecha entre un piso con o sin piscina también es especialmente abultada en Moncloa-Aravaca: 1.550 euros con piscina frente a 1.206 euros por una vivienda sin ella. O en Ciudad Lineal, donde la diferencia entre un piso con piscina (1.171 euros al mes) y uno sin ella (918 euros) es de 253 euros cada mes o algo más de 3.000 euros al año.
En ambos casos, alquilar con piscina resulta un 22% más caro. Por el contrario, existen otros distritos en los que apenas existen diferencias entre los alquileres de pisos con o sin piscinas, como en Vicálvaro o Retiro. ¿Merece la pena este sobreprecio por un servicio extra que apenas se utiliza unos meses al año?
Precios de venta hasta un 50% más caros
La misma brecha de precios existe en el caso de la compraventa. A grandes rasgos, en Madrid capital resulta más caro —en algunos casos mucho más caro— comprar una vivienda con piscina que sin ella. Así, en Villaverde, por ejemplo, la diferencia es de casi el 50%.
Según CBRE, el precio medio de un piso con piscina en este distrito es de 267.189 euros frente a los 136.435 euros de un piso sin piscina. Hay que tener en cuenta que, para este estudio, la consultora ha analizado pisos entre 70 y 110 metros cuadrados, que no son entreplanta, semisótano, bajo o ático, y que dispongan de dos o tres habitaciones, sin garaje ni trastero.
La diferencia de precios es también muy llamativa en Ciudad Lineal (370.501 versus 225.178 euros), Tetuán (485.714 versus 299.945 euros), Carabanchel (263.800 versus 164.357 euros) u Hortaleza (369.970 versus 234.675 euros). En todos estos casos, comprar un piso con piscina es un 38%-37% más caro que sin ella.
No obstante, en el barrio de Salamanca apenas existen diferencias de precios entre una vivienda con o sin piscina, mientras que en Villa de Vallecas y en la zona Centro incluso puede resultar algo más asequible comprar casa con piscina.
La llegada del verano y las continuas olas de calor en la capital provocan que muchos de quienes se plantean comprar o alquilar una vivienda presten especial atención a si el inmueble o la urbanización en la que se ubica dispone de una piscina, ya que, como publicaba recientemente El Confidencial, el número de piscinas municipales en la capital es insuficiente para una población que no para de crecer.